Miles de docentes se reincorporaron ayer a sus centros educativos. Con su vuelta empezó la cuenta atrás para el estreno de un nuevo curso escolar que tendrá lugar el próximo 12 de septiembre. Los maestros y profesores están a la espera de conocer más a fondo las prioridades del departamento de Ensenyament que lidera Josep Bargalló desde el pasado 1 de junio, día en que se nombró de modo oficial a los consellers del nuevo Govern que preside Joaquim Torra. Representantes del sector ya han hecho su carta a los Reyes Magos. Carles Lázaro, director de la Escola Salvador Vinyals y representante en la junta de directores de la red pública, sitúa varios temas que necesitan de solución. "Hay cuestiones que están sobre la mesa que urgen como la segregación y los recursos, y el primero de ellos afecta en especial a nuestra ciudad. En estos momentos, por ejemplo, aún estamos pendientes de la matrícula viva. En verano es cuando hay más movilidad de familias y cambios de residencia y no sabemos cuál será el impacto que tendremos en los próximos meses". Lázaro también pide al departamento mayor rapidez en resolver las becas de comedor. "Hay familias que todavía no saben si van a disponer de la beca y de qué cuantía. Es un tema que se resuelve muy "in extremis". Lo entendemos porque el número de solicitudes es muy alto y la gestión es cada vez más complicada pero debería haber algún sistema para conocer antes la resolución".
En la concertada también están a la expectativa de la política que aplicará el nuevo conseller Bargalló. En este sentido, la directora de la Escola Tecnos, Gemma Elias, hace mención de algunos aspectos académicos como la aplicación del cambio de evaluación a secundaria que pasa a ser competencial al igual que en primaria; es decir que ya no habrá las notas, los números de toda la vida sino que habrá conceptos que designaran el nivel de progreso del alumno.
Novedades en secundaria
En infraestructuras, la noticia más destacada es la apertura de los edificios de los institutos Can Roca y Les Aimerigues, que estos días están más atareados por el traslado. A esto se suma la puesta en marcha del nuevo instituto Joan Marquès en la sede de la Escola Joan Marquès de infantil y primaria.
Los docentes dedicarán estos días a cerrar la planificación del curso que ya dejaron en junio. Se centran en perfilar proyectos pedagógicos, designar tutorías y ajustar horarios, además de recibir y reunirse con los nuevos maestros y profesores que se incorporan a las plantillas. También mantendrán entrevistas con las familias, especialmente aquellas que los hijos empiezan párvulos de 3 años. Asimismo harán exámenes de repesca para alumnos que dejaron en junio asignaturas pendientes y que han tenido que hincar los codos durante el verano.