María Gervacio, la mujer que sufrió una presunta agresión el pasado 10 de julio en unos huertos de Torre-sana ha pedido al Juzgado de Instrucción número 1 de Terrassa que suspenda la fecha del juicio, previsto para el próximo miércoles 9 de agosto. "Hemos presentado una demanda por escrito pidiendo que se suspenda la vista porque estos hechos se tienen que considerar como un delito de odio y racismo, lo que pide tiempo para preparar un juicio con testimonios y pruebas claras", explicó ayer su abogado, Joan Tamayo. El conocido activista social detalló también que tiene previsto enviar un escrito a la fiscalía general de delitos de odio de Catalunya "para que ponga en marcha una investigación".
María, terrassense de origen dominicano, denunció haber recibido insultos "racistas" y golpes por parte de dos hombres mientras trabajaba en los huertos urbanos radicados en el Camí dels Monjos. Ella presentaba fractura en la muñeca derecha, contusiones en un tobillo y en otras partes del cuerpo y recibió asistencia en el Hospital de Terrassa. Los dos varones tenían arañazos, según el informe policial. Hubo denuncias cruzadas y en la vista provisional, la juez escuchó a ambas partes y calificó los hechos como "una simple falta leve" y "una pelea entre usuarios de un huerto". Tamayo destacó ayer que si se mantiene la vista del día 9, trabajarán igualmente en la defensa y presentarán "todos los testimonios y pruebas que tenemos, que son muchas".
Durante la rueda de prensa, con presencia de representantes de entidades vecinales, organizaciones y movimientos sociales y sindicales, María Gervacio aseguró que lleva meses "sufriendo insultos, vejaciones y amenazas" y manifestó que no quiere venganza sino "tolerancia y respeto para el ser humano, para que podamos construir una sociedad más justa". Gervacio pidió también la implicación de partidos políticos, sindicatos y organizaciones sociales "para que esto no vuelva a suceder".
Con el objetivo de mostrar apoyo a María, se ha convocado una concentración ciudadana el miércoles 9 de agosto a las nueve de la mañana en las puertas de los juzgados de Terrassa.