El astrofísico Guillem Anglada-Escudé, nacido en Terrassa y residente en Ullastrell durante su infancia y juventud, ha sido noticia esta semana por haber capitaneado el grupo internacional de científicos que ha descubierto un nuevo planeta similar a la Tierra que orbita a su estrella, Próxima Centauri, cada once días y tiene una temperatura que permitiría la existencia de agua líquida en su superficie. Anglada-Escudé, profesor en la Universidad Queen Mary de Londres, explica en esta entrevista los detalles de este hallazgo, bautizado como Próxima b, que ha revolucionado la comunidad astrónoma mundial.
¿Qué peculiaridades tiene el nuevo planeta llamado Próxima b?
Lo que sabemos seguro es que los datos han revelado la existencia de un planeta con al menos 1,3 veces la masa terrestre que gira en torno a la estrella Próxima Centauri cada 11,2 días a una distancia de unos siete millones de kilómetros. Haciendo cálculos diversos podemos decir también que su temperatura de equilibro es de menos 40 º. Parece muy baja pero el mismo cálculo para la Tierra da menos de 20º. Si el nuevo planeta Próxima b tuviera una atmósfera básica, su superficie podría mantener una temperatura "confortable".
¿Qué han averiguado más?
Otra de las cosas que podemos decir es que el hecho de que esté tan cerca de la estrella, una cara del planeta está permanentemente iluminada mientras que la otra está en la oscuridad. Esto quiere decir que no hay ni estaciones ni puestas de sol. La estrella siempre estaría en el mismo lugar del cielo. Esto es muy singular comparado con la Tierra pero es un hecho común al sistema solar también. Por ejemplo, la Luna hace lo mismo con la Tierra. Siempre vemos la misma cara. Este fenómeno se llama "rotación sincronizada por mareas". El periodo de rotación y el de la órbita son el mismo. A partir de aquí hay fórmulas pero todo es abierto.
¿Qué saben de cierto?
Lo que sabemos es que tomando como referencia los mejores modelos que tenemos para simular como se forman y evolucionan estos planetas, hay posibles relatos que conducen a un planeta con atmósfera y océanos. Si existen o no es un completo misterio y por ese motivo debemos continuar investigando. Muchas veces las simulaciones acaban produciendo planetas como Venus o como Marte (con nada de atmósfera o muy poca). Todo está abierto y la posibilidad de hallar nuevos planetas es real.
¿Usted cree que el nuevo planeta hallado ahora podría acoger vida humana?
No tenemos ni idea. En el supuesto que en los próximos años se pueda caracterizar la atmósfera podríamos empezar a responder esta pregunta. En cualquier caso, la mezcla de gases y características que tenemos en la Tierra es difícilmente reproducible con la m misma precisión. No tengo los números exactos pero la Tierra misma no hubiera sido habitable por humanos en gran parte de su historia.
¿Cómo se ha descubierto?
El nuevo planeta no lo vemos directamente. Es muy frágil y los instrumentos actuales de detección no pueden separar el planeta de la estrella hoy por hoy. Lo que hacemos es medir de forma muy precisa la velocidad en la que se mueve la estrella. Si hay un planeta alrededor, la atracción gravitatoria del planeta sobre la estrella hace que la estrella también se mueva. En este caso, la estrella se mueve a un cinco kilómetros por segundo. Planetas de mayor tamaño provocarían un movimiento de la estrella mayor.
¿Cómo calculan la velocidad en la que se mueve una estrella?
Miramos al espectro de la estrella que está llena de líneas de absorción. Por efecto Doppler, el movimiento hace que la luz se vuelva roja o azul en función de si la estrella se acerca o se aleja. Este patrón se repite con el periodo orbital. Cuando vemos este movimiento periódico y podemos descartar todo el resto de fuentes posibles de contaminación (actividad estelar, por ejemplo), entonces decimos que hemos detectado un planeta usando la técnica Doppler, que toma el nombre del físico austríaco Christian Andreas Doppler.