Aunque las jóvenes creen estar muy bien informadas sobre salud sexual, conocer todas las opciones anticonceptivas disponibles e incluso aseguran saber cual sería el método anticonceptivo que mejor se adapta a ellas, lo cierto es que una de cada cinco jóvenes españolas no utilizan ningún método anticonceptivo y todavía mantienen falsas creencias y mitos del pasado que deberían estar ya más que desterrados.
Así se recoge en el estudio “Mitos y realidades sobre la sexualidad y anticoncepción en las millenial españolas” realizado por la compañía Bayer en el marco del Día Mundial de la Anticoncepción. La encuesta -que se ha llevado a cabo en 11 países europeos y en Canadá- se ha realizado a mil millenial de España -mujeres nacidas entre los años 80 y 90-, la mayoría solteras (72 por ciento) y más de la mitad (53,2 por ciento) con estudios superiores.
Un fenómeno que también acontece en Terrassa, según afirman fuentes de la Consulta Sexual Jove de la ciudad. El Servicio que actualmente depende del Consorci Sanitari (CST) revela que el perfil mayoritario de las mujeres que acuden a su consulta es de mujer joven -hasta los 24 años- y soltera.
Y tal y como pone de manifiesto el estudio de Bayern, en la localidad egarense también hay desconocimiento y se mantienen falsas creencias sobre la salud sexual.
Entre los principales problemas de que ocurra este fenómeno está que las jóvenes se consideran a sí mismas bien informadas en cuestiones de sexualidad y anticoncepción, una visión que no siempre se corresponde con la realidad. No obstante, el número de visitas que recibe esta consulta baja año tras año, y ha descendido un 23 por ciento en solo 3 años, pasando de las 3.884 visitas en 2012 a las 3.020 en 2014.
Según informa la Consulta Sexual, si bien el preservativo es el método anticonceptivo más usado, también es cierto que gran parte de la población joven “lo utiliza mal”. Además, el segundo método que más utilizan los jóvenes es la popularmente denominada “marcha atrás” o coitus interruptus (CI), una medida fervientemente desaconsejada por los médicos, pues existe un alto riesgo de embarazo no deseado.
Finalmente, la píldora se sitúa en el tercer puesto como método anticonceptivo más utilizado. Estos datos reflejan que, pese a que existen unos 15 métodos anticonceptivos, los más conocidos por las chicas españolas son la píldora (95 por ciento), el preservativo (92 por ciento) y el anillo vaginal (85 por ciento).
Por otro lado, son pocas las que conocer los métodos anticonceptivos a largo plazo. Solo una de cada cinco chicas ha oído hablar de ellos y el 40 por ciento considera que no tiene información al respecto. De hecho, más del 70 por ciento conoce el DIU hormonal pero siguen existiendo algunos mitos que hacen que su uso no termine de convencer. El principal motivo para descartarlo es que el 64 por ciento de las jóvenes no quiere “tener un objeto extraño en el cuerpo”. Otras creencias falsas que son que su colocación es olorosa, que puede hacerte engordar, que puede afectar a la fertilidad e incluso que solo lo pueden utilizar las mujeres que ya han tenido hijos.
Otro de los mitos que aún perviven es que una de cada diez chicas creen que no pueden quedarse embarazadas mientras se está menstruando o que las duchas vaginales previenen el embarazo.
Unas creencias que no solo se dan en Terrassa o Catalunya, sino que también se pueden encontrar en los países europeos o Canadá, sitios donde Bayer hizo el estudio.
Las consecuencias
Estos mitos podrían ser una anécdota si no fuera por las consecuencias que acarrean, según manifestó la representante de Bayer, Carlota Gómez. Y es que el 40 por ciento de los embarazos en adolescentes son no deseados y el 60 por ciento de éstos acaban en aborto.
El año pasado abortaron 551 mujeres, una cifra que pese a ser inferior que la de 2013 -cuando interrumpieron su embarazo 572 mujeres- es superior a la de 2012 en 20 abortos. No obstante lejos quedan aquellas 702 interrupciones de embarazo que se registraron en 2008, la cifra más alta desde que empezó el nuevo milenio. Desde entonces, las mujeres que se sometieron a un aborto fueron en descenso, hasta que en 2013 se repuntó con las citadas 572. Cabe remarcar que estas cifras, ofrecidas por el Institut Català d’Estadística (Idescat) son provisionales a falta de las que debe aportar el Ministerio Español.
En cuanto al Vallès Occidental y a Catalunya, la tendencia ha sido de ir a la baja desde el 2008. Así, en los últimos tres años los abortos han descendido un 8,3 por ciento, pasando de los 2.184 en 2012 a los 2.003 del año pasado. En cuanto a la comunidad catalana, las mujeres que han decidido interrumpir el embarazo han pasado de las 20.731 del 2012 a las 18.147 en 2014, lo que representa una reducción del 2,5 por ciento.
Existen varios perfiles de mujeres que deciden abortar, según fuentes de la Consulta Sexual Jove de Terrassa, aunque no obstante en gran parte de los casos se suelen dar unas características comunes entre las chicas. Así, se trata de jóvenes solteras, que no viven en pareja, y que o bien están estudiando secundaria o bien están buscando su primer trabajo.
Por otro lado, y en función de su carácter, su situación personal y sus “propias herramientas de gestión emocional”, hay quienes prefieren ir solas y otras que se decantan por acudir acompañadas, principalmente por alguna amiga o por su pareja.