Terrassa

Un reparto de lujo rueda en Terrassa “Contratiempo”

El reparto de auténtico lujo con el que cuenta Oriol Paulo en el rodaje de su segunda película da una idea de la solidez del guión que él mismo ha escrito y que estos días rueda en el Parc Audiovisual de Terrassa.
Mario Casas, Bárbara Lennie, Ana Wagener y José Coronado interpretan a los cuatro personajes principales de “Contratiempo”, un “thriller” con “tintes judiciales”, como lo describe Paulo, en el que “nada es lo que parece” (como insisten en subrayar una y otra vez varios miembros del equipo.)

La película aún no tiene ni teaser, ni trailer, pero sí un conjunto de imágenes ya rodadas y que se han agrupado para mostrarlas a los distribuidores internacionales y en las que se desvela la estética de un film cuyas escenas se ruedan en varias localizaciones: País Vasco (ya han estado en Lekeitio), Barcelona (con imágenes del Puerto de Barcelona o unas oficinas en Poblenou, concretamente el edificio Mediapro), el Parc Audiovisual de Terrassa y el Vall de Núria, donde el equipo finalizará el rodaje a principios del próximo mes de diciembre.

De las nueve semanas que dura el rodaje, cuatro las pasarán en el Parc Audiovisual. El plató número 1 alberga los decorados que se han construido especialmente para el film, y donde transcurren algunas de las escenas más intensas de la película.

“Contratiempo” cuenta la historia de Adrián Doria (Mario Casas), acusado de un asesinato del que se declara inocente. Doria, un empresario de éxito, casado y con una hija de corta edad, contrata los servicios de Victoria Goodman (Ana Wagener) la mejor preparadora de testigos del país, para que le ayude a preparar su juicio. Las cosas se tuercen cuando aparece un testigo sorpresa.

En un encuentro con un reducido grupo de medios de comunicación, el director de la película y sus cuatro protagonistas principales desvelaron algunos de los detalles del film, en uno de los pocos días en el que coincidían los cuatro protagonistas en Terrassa.

La película comienza cuando su protagonista “despierta junto a un cadáver. Le han tendido una trampa, pero todas las pruebas le señalan”, cuenta Oriol Paulo. “Que levante la mano quién es el cadáver”, pide entonces. Barbara Lennie, a la que hemos visto con antelación rodando una escena en el interior de un coche, se revela como la muerta. Es, además, la amante del acusado. La historia se hilvana a partir de “flashbacks”, como “un puzzle”, por lo que el personaje de Lennie, pese a estar muerta, tiene un papel fundamental.

Su personaje se llama Laura y es fotógrafa de moda. “Es una mujer de vida ajetreada, con un marido bien posicionado. Tiene un buen poder adquisitivo, vive viajando y de vez en cuando se encuentra con Adrián. Por ciertas cosas que ocurren la cosa se tuerce, y muere”, relata Lennie.

Más misterioso, si cabe, es el papel de José Coronado. De él poco sabemos. “Un hombre que vive retirado en la montaña, el personaje que es el ‘contratiempo’.” Tiene un hijo que “me trae loco, que viene y va y nunca sé si le ha pasado algo”, cuenta Coronado.

Por su parte, Ana Wagener interpreta a “una mujer rara, excéntrica”, a la que se ha dado “un toque más sofisticado para llegar a lo que queríamos.” Con ella, Mario Casas mantiene un intenso diálogo que dura toda la noche: “Sucede todo dentro de un piso, y es un tú a tú con una gran actriz”, admite Casas.

Ensayos previos
Ese tú a tú aún no ha empezado, pero sí llevan varias sesiones de ensayo. Lo hacen muy cerca de dónde está construido el decorado de esa habitación en la que intentan desenmarañar el misterioso crimen. Además el plató alberga otros dos grandes decorados en los que transcurre la acción: el comedor de la casa del protagonista y el pasillo junto con la habitación de hotel “donde pasa todo”, dicen, sin desvelar nada más. El director de arte es Balter Gallart, un profesional con más de cuarenta películas a sus espaldas, que intuye (y así se lo confirma una profesional del Parc Audiovisual) que es el director de arte que más ha trabajado en esas instalaciones.

Oriol Paulo también es un viejo conocido de este espacio, donde rodó su debut, “El cuerpo”, en 2012, y es también guionista de otros dos films rodados en nuestra ciudad: “Los ojos de Julia” y “Secuestro.”

También es asiduo Coronado, que ya lleva “cuatro o cinco películas”, recuerda, desde que se estrenara al lado de Pablo Carbonell en “Lo mejor que le puede pasar a un cruasán”. Más tarde se ha convertido en una especie de “actor fetiche” de Paulo. “Para mí es un contagiador de entusiasmo, sencillo, un buen amigo”, admite Coronado.

El director presenta ahora una producción que “intentamos contar al detalle, de una forma caleodoscópica, con tiempo para entrar en cada personaje.” Y lo hace, según Casas, con “un guión maravilloso, espectacular, que te atrapa desde el minuto uno y al que es imposible decir que no”… Habrá que esperar a su estreno, en diciembre de 2016, para comprobarlo.

To Top