“Regresión”, de Alejandro Amenábar, supone el retorno al cine del director, seis años después del estreno de la controvertida “Ágora”. También en esta ocasión adapta una historia real en la que está presente el conflicto entre la razón y la fe aunque se trata de dos películas radicalmente distintas (aquí el tema es tangencial y no salen bien parados ni el cura ni el científico). En esta ocasión, la trama gira en torno a un policía que investiga el caso de una adolescente que acusa a su padre alcohólico de haberla violado mientras practicaba un ritual satánico. El título hace referencia a una terapia de hipnosis a la que se someten varios personajes y que tiene un peso determinante en el desarrollo de la acción. El guion es muy tramposo pero elude la vertiente sobrenatural (nada que ver con “El exorcista” y similares, a pesar de su estética setentera) para centrarse en los aspectos criminales y psicológicos de la historia, con la intención de hablar de histeria colectiva, paranoia, relaciones familiares, abusos a menores y el ya citado enfrentamiento entre la fe y la razón, así como para explorar los límites de la maldad humana. El problema es que todo eso suena mucho más interesante de lo que en realidad aparece plasmado en la pantalla. Por desgracia, “Regresión” es una cinta fallida en la que no asoma por ningún lado la atmósfera de tensión que requería un film de estas características y a media película el espectador ya está bostezando de aburrimiento. Además, aunque el reparto sea de lujo, que lo es, ninguno de los actores parece hallarse lo que se dice en su mejor momento, quizás porque no se creen nada de lo que hacen y dicen sus personajes. Y es que, aunque lo que se cuenta sea real y no fantástico, eso no implica que resulte verosímil.
Intérpretes: Ethan Hawke, Emma Watson, David Thewlis, Lothaire Bluteau, David Dencik, Aaron Ashmore. (Cinesa).
“El precio de la fama”, de Xavier Beauvois, también se inspira en un hecho real, en este caso el robo del cadáver de Charlot de un cementerio suizo en marzo de 1978. En tono de comedia agridulce, Beauvois cuenta la historia de un expresidiario con problemas económicos que decide, junto a unos amigos igual de pobres que él, profanar la tumba de Chaplin y pedir un rescate a la familia. El director ha querido hacer un film chaplinesco en todos los sentidos e incluso ha incluido en el reparto a un hijo y a una nieta del gran Charlot pero el resultado final le ha quedado un poco irregular y en Francia, su país de origen, las críticas fueron malas, lo que no impidió, por otra parte, que el film fuera invitado a un sinfín de festivales internacionales. En la parte positiva, cabe señalar que el guion es simpático, contiene gags divertidos y trasfondo humanista y que los actores tienen química y realizan un buen trabajo, aunque sus personajes sean estereotipos y las actrices no pinten gran cosa. En el lado negativo, la parte dramática no acaba de funcionar, el conjunto es algo disperso, la dirección carece de garra y el ritmo de dinamismo. Lo más controvertido, no obstante, ha sido la banda sonora.
Intérpretes: Benoît Poelvoorde, Roschdy Zem, Séli Gmach, Chiara Mastroianni, Nadine Labaki, Peter Coyote, Dolores Chaplin, Eugène Chaplin. (Catalunya, VOSE).
“Hitman: agente 47”, “opera prima” de Aleksander Bach, es la carísima adaptación al cine de un popular videojuego, ya llevado anteriormente a las pantallas en 2007 por Xavier Gens, entonces con Timothy Olyphant de protagonista. No es, sin embargo, una secuela sino lo que ahora llaman un “reboot”, es decir, fingir que la película anterior nunca existió (aunque el guionista resulta que es el mismo). Trata de un agente modificado genéticamente que se enfrenta a una organización terrorista que pretende crear un ejército de asesinos letales para dominar el mundo. Se ha rodado en Alemania y Singapur. El film destaca por sus secuencias de acción y por los efectos especiales. Por el contrario, el guion y los diálogos resultan tontos y superficiales y sólo constituyen una excusa para justificar los tiroteos y las explosiones. Parece ser que en Estados Unidos ha sido un fracaso en taquilla. La anécdota es que Rupert Friend sustituyó al fallecido Paul Walker, que era el actor previsto inicialmente para reemplazar a Olyphant cuando éste último se negó a retomar el personaje. Dicen que Friend quiso interpretar personalmente sus escenas de acción y acabó herido. Por el contrario, su antagonista Zachary Quinto recurrió a un doble cuya cara resulta claramente visible en algunos planos (es increíble que nadie se diera cuenta).
Intérpretes: Rupert Friend, Hannah Ware, Zachary Quinto, Ciarán Hinds, Thomas Krets-chmann, Jürgen Prochnow. (Cinesa).
“Amour fou”, de Jessica Hausner, es un drama “antirromántico” con toques de crítica social, basado en hechos y personajes reales, que supone el retorno al cine, después de cinco años de ausencia, de la aclamada directora de “Lourdes”. Los protagonistas son el escritor alemán Heinrich von Kleist y Henriette Vogel, una mujer deslumbrada por sus poemas. Los personajes viven en un entorno represivo en el que está mal visto mostrar los sentimientos y en el que las apariencias son lo único importante, algo que la directora satiriza con sutileza y elegancia. Un crítico de la revista Variety escribió que parecía “una comedia de Jane Austen dirigida por Michael Haneke” (Hausner se inició en el cine precisamente en un film de Haneke, “Funny games”, en calidad de script, mientras que el protagonista salía en “La cinta blanca”). La película destaca por la belleza de sus imágenes, de inspiración pictórica tanto en la composición de los planos como en la iluminación y el color. También resaltan los diálogos y la ambientación. El año pasado estuvo “nominada” a ocho premios del cine austríaco y consiguió dos, los de mejor guion y montaje.
Intérpretes: Christian Friedel, Birte Schnoeink, Stephan Grossmann y Katharina Schüttler. (Filmoteca, Club Catalunya, miércoles noche, VOSE).
