“Historia recreativa”, le llaman, y el adjetivo tiene aquí tanto su acepción de entretenimiento como de reproducción de un suceso del pasado. Está en auge. El pasado 18 de junio, seis mil figurantes escenificaron en Bélgica la batalla de Waterloo de 1815. En Terrassa no tenemos hechos históricos tan decisivos, pero desde hace cinco años la colla Els Federins recrea el asalto de un “escamot” carlista a la ciudad del 22 de julio de 1872. Los terrassenses, afectos a la causa liberal, se les enfrentaron y lograron que los carlistas pusieran los pies en polvorosa, pero sus disparos dejaron dos muertos: Joaquim Jover y Valentí Alagorda. En 1912 se inauguró un monolito en su memoria.
Hoy, Els Federins vuelven a realizar la escenificación conmemorativa, con el mismo itinerario y programa que en pasadas ediciones. A su llegada al Raval, a las 7.30 de la tarde, se procederá al nombramiento del Trabucaire d’Honor 2015. El título se concede este año al periodista y escritor Enric Calpena, por su novela “Memòria de sang”. “Es una obra que narra las vicisitudes de los Miquelets de la Diputació, una unidad militar de voluntarios creada por el general Prim, que participó en la batalla de Wad-Ras (1859-1860)”, señala Josep Sellarès, cap de colla dels Federins. “Nuestro uniforme está inspirado en el que llevaba esa unidad.”
El programa
►6.30 de la tarde. Recreación del asalto carlista, desde la estación de la Renfe hasta el Raval.
►7.30. En el atrio del Ayuntamiento, investidura de Enric Calpena Ollé como Trabucaire d’Honor 2015
►Ocho de la tarde. Cercavila hasta el monolito en recuerdo de Joaquim Jover y Valentí Alagorda.
►Nueve de la noche. Cena popular en el Passeig de Joan Miró (reservas en el teléfono 650 033 956)