La semana pasada, en la Junta de Portavoces de los partidos con representación en el Ayuntamiento de Terrassa, se aprobó una propuesta de Ciutadans donde se insta al gobierno de ERC y Convergència, de conformidad con la moción aprobada por el pleno del Parlament de Catalunya el pasado 3 de marzo de 2016, para que garantice, tal como establece la ley de educación, una financiación de las guarderías que cubra como mínimo un módulo económico de 1.600 euros por plaza y año, y se comprometa a aumentarlo progresivamente hasta los 1.800 euros por plaza y año acordados con los ayuntamientos. Y que se abone, al Ayuntamiento de Terrassa, la deuda pendiente derivada del incumplimiento de su compromiso y obligación de financiación de las guarderías.
La propuesta de Ciutadans es coherente dado que, según la Ley 12/2009, del 10 de julio de Educación, se establece que el gobierno de la Generalitat debe incrementar progresivamente los recursos económicos destinados al sistema educativo y, tomando como referencia los países europeos que se distinguen por su excelencia en educación, debe situar progresivamente el gasto educativo cerca de, como mínimo, el 6% del producto interior bruto en un periodo de ocho años. En la práctica lo que sucedió el pasado 3 de marzo es que el gobierno de la Generalitat se prorrogó en cinco años el tiempo que se estimó necesario para llevar a término sus propios compromisos.
Estamos a años luz de que en España el sistema educativo dé respuesta a la demanda de las personas y del sentido común para que el sistema cubra de 0 a 3 años las necesidades reales de unos ciudadanos hartos de hacer piruetas entre la dedicación al trabajo y la dedicación a la familia. Por eso es imprescindible una educación universal y gratuita que pueda atender a los más pequeños de las familias que así lo requieran. Nos podemos seguir engañando en Catalunya con las trampas de un Govern que se autoprorroga la aplicación de sus propias leyes alegando que no tiene recursos porque el malvado Estado español la tiene tomada con Catalunya. Mientras tanto, despilfarra y no atiende su obligación de gestionar con responsabilidad sus competencias en temas sociales y educativos manteniendo la construcción de un Estado propio exprimiendo los bolsillos de todos los catalanes con la presión fiscal más alta de España, y una de las más altas de Europa.
ERC votó en contra de que Terrassa solicitara que la Generalitat aumentara los recursos para las guarderías, Convergència se abstuvo… En Ciutadans no sabemos qué es peor, si la hipocresía de ERC o el cinismo de Convergència; juzguen ustedes.
El autor es portavoz del grupo municipal de Ciutadans (C’s)