El Automobile Barcelona, el Salón Internacional del Automóvil, que llegará a su centenario en la próxima edición, prevé exponer más marcas, convertirse en un evento de masas y confirmarse como “un oasis institucional” al que asista tanto la Corona como los máximos representantes del Gobierno y del Govern. El presidente del Automobile Barcelona, Enrique Lacalle, se mostró ayer especialmente optimista respecto al impacto que tendrá la nueva edición del salón, que se celebrará del 11 al 19 de mayo del próximo 2019, y pidió para ello la ayuda, en concreto, de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. “Necesitamos que Barcelona se implique y se vista de salón”, remarcó Lacalle. Entre los elementos que harán del nuevo Automobile un salón de récord. Enric Lacalle destacó la presencia de más marcas (en la última edición fueron unas 30 las que aterrizaron en Barcelona), en un momento en que éstas han dado un giro a sus estrategias comerciales y han empezado a ausentarse de las tradicionales ferias.