Jordi Fonollosa, responsable técnico de Skeyndor, asegura que la empresa reinventa constantemente procesos y productos.
¿En qué proyecto trabajan actualmente?
La verdad es que en un mercado tan dinámico como el de la estética profesional, con tres lanzamientos anuales de promedio, siempre estamos trabajando en varios proyecto a la vez.
¿Están en un mercado muy competitivo?
Sí. Pero eso es bueno, y es muy estimulante. Nos obliga a mejorar en producto y procesos diariamente, y ha reinventarnos permanentemente.
¿De qué producto se siente más orgulloso?
Sin querer parecer demagógico, pero la verdad es que de todos. En cada proyecto ponemos realmente el mismo grado de trabajo e ilusión. Después es el mercado quién decide qué gusta más o qué menos.
¿Cómo es el ambiente de trabajo en Skeyndor?
Personalmente, creo que es excelente. Tenemos a muy buenos profesionales en la empresa, que atesorán mucha experiencia y, que además de ser grandes personas, saben trabajar y apoyarse en equipo. Por todo ello, resulta muy cómodo trabajar en estas condiciones y nos permite afrontar grandes retos sin ningún tipo de miedo a fracasar.
¿Qué lo que más le gusta de su empleo?
La verdad es que … ¿todo? Es un gran empleo. La relación con la junta directiva de la compañía es muy fluida, la marca está muy consolidada en el mercado nacional e internacional, y el sector de la estética profesional es un buen sector en cuanto a inversiones y desarrollos interesantes en materia de I+D+i.
¿Se ve toda su vida laboral en esta empresa?
Por mi estupendo.