Esta noche la Filmoteca estrena “The guilty”, un absorbente thriller que hasta ahora lleva ganados treinta premios internacionales en festivales como los de Sundance, Rotterdam y Valladolid, entre otros. También representó a Dinamarca en los Oscar el año pasado y estuvo “nominado” a los galardones del Cine Europeo pero no había llegado a proyectarse nunca comercialmente en Terrassa.
El film tiene como protagonista a un policía que trabaja en el servicio de emergencias y recibe la llamada de una mujer que asegura haber sido secuestrada.
El debutante Gustav Möller saca mucho partido de una historia de situación única –pero con sorpresas–, que se desarrolla casi toda en el mismo escenario en tiempo real y que tiene muy pocos personajes, el más importante de los cuales podríamos decir que es el teléfono, en la línea de títulos como “Locke”, “Cellular”, “Buried”, “Voces de muerte” o “Última llamada”.
La atmósfera de “suspense” está muy lograda y el guion mantiene el interés de principio a fin. Möller no necesita recurrir a artificios visuales ni a un gran presupuesto ni mucho menos a un metraje desmesurado, como tantos otros directores. A él le bastan los diálogos –es coautor del guion junto a Emil Nygaard Albertsen– y el rostro del protagonista para hacer maravillas, demostrando que cuando hay talento e ideas se pueden rodar buenas películas con muy poco dinero.
La curiosidad es que Möller se rodeó de un equipo técnico formado principalmente por sus antiguos compañeros de clase en la Escuela Nacional de Cine danesa.