El empresario hotelero Joan Gaspart ha negado ante el juez haber estafado 15 millones a Barcelona Project’s, del príncipe saudí Turkin Bin Nasser, ya que la sociedad estaba al corriente de la deuda existente en el Complejo Real, que estuvo a punto de quebrar.
El que fuera presidente del FC Barcelona entre 2000 y 2003, y actual vicepresidente para Asuntos Internacionales e Institucionales de la Real Federación Española de Fútbol, ha comparecido hoy como investigado por esta causa ante el juzgado de instrucción número 16 de Barcelona, después de que la Audiencia de Barcelona ordenara reabrir la causa, que inicialmente se archivó en abril de 2018.
Según fuentes de la acusación, el empresario barcelonés ha respondido a todas las preguntas que se le han formulado y ha defendido que en ningún momento se engañó a Barcelona Project’s, que le encargó a HUSA -propiedad de Gaspart y su familia- el arrendamiento y explotación de todo el Complejo Real, que incluye el hotel Juan Carlos I y el Palacio de Congresos, durante siete años.
En su declaración, Gaspart ha asegurado que la sociedad de propiedad saudí estaba al corriente de que las empresas Hostelería Unida (HUSA) y Banquetes Reunidos SL habían contraído una deuda de 15 millones con la Seguridad Social cuando Gaspart gestionaba el hotel Juan Carlos I, ahora a cargo de Fairmont.
El empresario también ha sostenido que Barcelona’s Project sabía que se había usado el Palacio de Congresos como garantía de un préstamo de 1,6 millones, ya que este importe se usó para intentar paliar la delicada situación de la compañía HUSA.
Sin embargo, en la querella presentada por la sociedad del príncipe saudí Turkin Bin Nasser -a quien representa el abogado Javier Yagüe, del despacho de abogados Amparo Legal- se acusa a Gaspart de haber ocultado los impagos para obtener un acuerdo de resolución de contrato donde se fijaba un precio “que en modo alguno habría sido el mismo de no haber existido el engaño omisivo”.
“Es decir, los querellados ocultaron dolosamente las deudas contraídas con la Seguridad Social para, con evidente ánimo de lucrarse, pactar un precio en el acuerdo contraído con la querellada en perjuicio de esta última, acuerdo que jamás habría sido alcanzado de no haberse ocultado la existencia de dichas deudas”, apunta la querella.
Según la querella, Husa y la familia Gaspart, “prevaliéndose de su reconocimiento social y empresarial, malbarataron por completo el complejo, buscando su propio beneficio, llegándose a apropiar de importantes sumas de dinero, e incumplieron todas sus obligaciones y las que existían frente a terceros, hasta llevar al Complejo al borde de la quiebra total”.
De esta forma, Barcelona Project’s SA tuvo que afrontar un procedimiento de derivación de responsabilidad, en el que la Seguridad Social le exige al príncipe saudí el pago de dicha deuda.
Además, la querella relata que, aprovechando su situación, Gaspart y su familia, “en una actuación desesperada por obtener dinero” para “atenuar la catastrófica situación financiera de HUSA”, solicitaron un préstamo con garantía hipotecaria por 1,6 millones de euros, en el que pusieron como garantía el Palau de Congresos “sin el consentimiento y ni siquiera el conocimiento de Barcelona Project’s”, aprovechándose de unos poderes otorgados en el pasado.