Uno se puso a correr al ver a unos policías y los policías lo cazaron. Llevaba hachís, el suficiente como para presuponer que aquella no era cantidad para consumo propio, y 190 euros. Los agentes lo detuvieron. Otro fue apresado por el mismo delito, tráfico de drogas, por trapichear en la terraza de un bar. Llevaba 88 bolsas con maría.
El viernes, a eso de las 4.25 de la tarde, agentes de la Policía Municipal patrullaban por Ca n’Anglada. Junto al pasaje de la Constància, un individuo que caminaba por la zona vio a los guardias y emprendió la huida a la carrera. Los policías fueron tras él y lo interceptaron. Lo identificaron y cachearon, y le intervinieron varias porciones de hachís: el peso total era de 50,1 gramos. El sujeto portaba asimismo 190 euros en billetes fraccionados, según la policía. Una vez detenido como presunto autor de un delito contra la salud pública (tráfico de sustancias estupefacientes), la policía lo trasladó a MútuaTerrassa a petición del propio implicado. Y después, a la Jefatura para la instrucción de diligencias. El cuerpo local le entregó varios requerimientos que tenía pendientes.
La segunda actuación policial tuvo lugar el sábado por la noche en un bar de la calle de Miquel Vives y se desencadenó por la llamada de una persona. El aviso, a las 9.40 de la noche, alertaba a la Policía Municipal de la intensa actividad de un traficante que llevaba toda la tarde vendiendo drogas en la terraza interior de un bar, según el informador. Dos dotaciones policiales acudieron al establecimiento. El presunto traficante continuaba allí junto a otra persona que fue identificada.
La descripción del sospechoso correspondía a la facilitada por el testigo por teléfono. Los agentes lo registraron. Iba cargado de bolsas con marihuana: 88 bolsitas preparadas como dosis para la venta, y llevaba también una bolsa grande con hachís y dinero, según la información policial. Fue detenido.
Otro sospechoso echó a correr al ver a unos policías en Ca n’Anglada
