Nueve años después, la Cambra de Terrassa vivió ayer una jornada electoral presencial para renovar sus órganos de gobierno con la gran innovación, introducida este año, de que el voto ya no era en papel sino electrónico. De hecho, 858 empresas aprovecharon el plazo abierto entre el 2 y el 7 de mayo para ejercer su sufragio desde dispositivos remotos. Ayer la afluencia de electores fue constante y se produjeron picos de asistencia sobre todo a primera hora de la mañana. A las diez se formó una notable cola de votantes. Luego, con altibajos, el goteo fue constante. Sobre las 4 de la tarde, había participado más de un centenar de electores.
A primera hora votó el candidato a la presidencia Ramón Talamàs, que tiene el apoyo de Cecot; Natàlia Cugueró, su oponente y que encabeza una lista independentista, lo había hecho por medios electrónicos en los días previos, aunque también estuvo en la Cambra. Pudieron saludarse y dejar constancia de la foto para la posteridad. Uno de ellos sustituirá a Marià Galí, presidente en los últimos casi trece años y que no se ha presentado a la reelección. En juego está la presidencia de la cámara de comercio más antigua de Catalunya (y la tercera de España). La sala de plenos de la cámara local se habilitó como colegio electoral. Tres empresarios, Joaquim López, como presidente, y Mateo Hilderink y Rosa Galcerán, como vocales (elegidos todos por sorteo) gestionaron la mesa electoral comprobando la documentación de los electores. Una vez realizado este trámite, se les otorgaba una clave de un único uso para que pudieran ejercer el voto electrónico desde los terminales anexos. En la sala, había personal de la Cambra en labores de asesoramiento, un técnico de soporte informático, un representante del órgano tutelar y los interventores de las candidaturas en liza. Todo preparado para que empresarios y autónomos pudiera votar sin contratiempos. "No ha habido problemas, los electores sabían perfectamente la documentación que debían presentar, ya sea DNI, escritura de la empresa o poderes si es el caso", comentó Joaquim López, gerente de Bidons Egara. "Hemos realizado una intensa tarea de sensibilización a través de nuestra web y redes sociales para que nadie se desplazará hasta aquí y se encontrase con problemas en la documentación", añadió Marta Torrents, secretaria general de la Cambra.
A vueltas con el censo
Marta Torrents se refirió a algunos déficits en el censo que denunciaron en la víspera las dos candidaturas. "El censo responde a datos facilitados por Hacienda de diciembre de 2017; desde entonces han nacido empresas que no tenemos censadas o que no lo estaban porque no habían comunicado su actividad a Hacienda". Por eso mismo se insistió mucho a las empresas que comprobaran si estaban correctamente censadas.
"Las cámaras están dominadas por grandes empresas y en Catalunya la mayor parte de tejido empresarial son pymes. Estas deben tener voz dentro de las cámaras porque ahora no la tienen". Así opinó Pere Altonell, que ejerció el voto a primera hora de la tarde. El empresario egarense Martí Lloveras destacó, por su parte, que en esta ocasión se haya fomentando la participación de las empresas en las elecciones camerales. "Veo que hay mucho movimiento y es una buena noticia la participación en unas elecciones para institución tan importante como la Cambra de Comerç de Terrassa".
Yolanda Alfaro, de Alfaro Alimentación, destacó que lo "importante es que nos involucremos el mayor número de personas porque así saldrán cosas buenas". Marta Usieto, del Centre Mèdic Utset, era la primera vez que votaba en unas elecciones a la cámara de comercio de Terrassa. "Tanto desde Cecot como desde la Assemblea Nacional de Catalunya me han invitado a que vote. Es positivo que haya alternativas y que podamos elegir".