CaixaBank ha estrenado los primeros cajeros automáticos que sustituyen el actual código de seguridad, el pin, por la tecnología de reconocimiento facial, de tal modo que los usuarios solo necesitan acercar su cara al terminal para sacar dinero. La entidad financiera presentó ayer en rueda de prensa los nuevos terminales, que actualmente solo están disponibles en cuatro de los Store que hay en Barcelona, pero que se espera que a finales de año ya estén implantados en las trescientas oficinas de esta naturaleza que ya existen.
Para garantizar la seguridad de las operaciones, el nuevo sistema, desarrollado con Fujitsu y FacePhi como socios tecnológicos, valida hasta 16.000 puntos de la imagen del rostro del usuario, a quien además se le pide que siga unas instrucciones (que se mueva) como “prueba de vida”.
Para poder sacar dinero usando el reconocimiento facial, los clientes deberán contactar antes con su gestor para efectuar una primera captura, a partir de la cual se le identificará. El director general del negocio digital de CaixaBank, Benjamí Puigdevall, destacó que la necesidad de recordar el código pin es una de las dificultades que los clientes suelen aducir para sacar dinero del cajero. “En el contexto financiero actual, la seguridad y la agilidad en las transacciones son claves, y la incorporación de la tecnología biométrica en los cajeros ofrece múltiples ventajas en estos ámbitos”, recalcó.
Experiencia innovadora
Por su parte, el director ejecutivo de experiencia global del cliente, Jordi Nicolau, resaltó que el uso del reconocimiento facial da al usuario una experiencia “distinta e innovadora” respecto a su aproximación habitual a la hora de obtener dinero en metálico. “El liderazgo tecnológico nos ayuda a dar el mejor servicio a nuestros clientes y de forma más cercana y especializada”, destacó en un comunicado el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar.
El proyecto de implantación de la tecnología de reconocimiento facial se enmarca en el Plan Estratégico 2019-2021 de la financiera, y se engloba dentro de neX, la nueva estructura organizativa creada recientemente por CaixaBank, centrada en la transformación digital, que agrupa todas las áreas con el foco en la relación con los pequeños clientes. Antes de la implantación en los primeros cajeros, la entidad financiera realizó un estudio con clientes reales para valorar el grado de aceptación de la identificación por reconocimiento facial. Según informa la entidad financiera, los resultados de estas pruebas fueron muy favorables a su utilización: hasta un 70% de los encuestados estarían dispuestos a utilizarlo como alternativa a la tradicional introducción de su código personal vía teclado.