El año 2019 ha llegado con una congelación de las tarifas del transporte público, de la factura del agua, la del IBI y la tasa de vehículos en Terrassa, pero con aumentos en todos los peajes, los parkings y en la tasa de residuos. El Ano Nuevo estrena además precios más baratos en una lista de 1.200 medicamentos, entre ellos el principio del ibuprofeno. Estos son algunos de los cambios que ayer entraron en vigor.
El IBI, la tasa de residuos. Por lo que respecta a los impuestos y tasas municipales, el pleno ha aprobado un aumento desigual en función del tributo que se aplicará a partir de este mes de enero.
El IBI se congela. El Ayuntamiento ha decidido no aplicar ningún incremento al impuesto sobre los inmuebles para frenar la repercusión de la revisión catastral de 2017. La administración local elimina en 2019 los topes que amortiguaban el impacto de la revisión durante los primeros años, de manera que, a la práctica, el IBi aumentará en muchos hogares. El Ayuntamiento calcula que un 1% de los inmuebles registrarán incrementos superiores al 5%.
También pagarán más los titulares de vados en la ciudad. La tasa se adapta este año a la revisión catastral, lo que comportará aumentos en buena parte de los guals.
El IAE, impuesto que liquidan las empresas que facturan por encima del millón de euros, aumenta un 5% este ejercicio y la tasa de residuos volverá a subir este año. Lo notarán los residentes, que verán como el recibo se dispara un 5% , y también los comerciantes, que deberán pagar un 3% más.
Finalmente, las transacciones inmobiliarias se encarecerán en 2019. El tipo impositivo de la plusvalía aumentará hasta el 30%, mientras el del impuesto de construcciones volverá al 4% que ya se aplicaba en el año 2009.
Transporte público. Los títulos integrados del transporte público no aumentan de precio durante 2019. La ATM ha decidido congelar tarifas y Terrassa se ha sumado a la iniciativa. Comprar la T-10, la T-Mes y el resto de títulos metropolitanos no tienen un coste añadido este año, en el que Terrassa también mantiene los precios de títulos propios del transporte como la T-25 o la T-16.
Además, desde ayer los usuarios del bus, el tren y el metro de 36 municipios del área metropolitana pasarán a pagar como zona 1.
Los usuarios del tren tampoco han visto incrementarse el billete en Rodalies ni en alta velocidad. Sin embargo, los trayectos regionales aumentan un 3,5 por ciento.
Taxis y parkings. Los taxistas de Terrassa mantienen los precios durante el arranque del Año Nuevo y en el mes de marzo someterán a revisión sus tarifas en la ciudad. Será entonces cuando el usuario sabrá si le cuesta más o menos la carrera. El sector lleva años conteniendo precios y ahora se enfrenta a la llegada de la plataforma Uber a la ciudad, donde ya ha empezado a operar.
Por lo que respecta a los parkings públicos y privados, el pleno aprobó un incremento máximo del IPC. Cada operadora decideahora cual es el aumento que aplica.
Peajes. Circular por las carreteras catalanas ya resulta más caro desde que ayer estrenamos 2019. Las autopistas del Estado han aumentado el precio de sus peajes una media del 1,67%, que se suma al 1,91% que ya aplicaron en 2018.
La de este año será la última subida para las barreras de la AP-7 en el tramo entre Tarragona y Valencia ya que la concesión finaliza a finales de diciembre deeste año.
En las vías de la Generalitat, los peajes aumentan entre el 1,5% y el 2,9%. Así, la barrera de los túneles de Vallvidrera pasará a costar entre 3,86 euros y 4,34 euros, en función de si se trata de una jornada laboral o fin de semana, y pasar por el peaje de Les Fonts costará entre 1,41 y 2,62 euros, lo que supone una subida del 2,13%.
Circular por el Túnel del Cadí cuesta 12,07 euros desde ayer, por los túneles del Garraf 6,93 euros y por el tramo de Sitges-Vendrell 4,14 euros. Para desplazarse por la C-16 hasta Manresa hay que desenvolsar entre 4,41 y 8,01 euros.
Suministros. En la factura doméstica se notará este principio de año una subida contenida de los suministros. El Gobierno mantiene la parte regulada tanto del recibo de la luz como el del gas. La congelación afecta al 40% de la factura eléctrica, que oscilará en función de la parte dependiente del mercado de regulación eléctrica. En el caso del gas, el recibo se reducirá un 4% respecto al último trimestre de 2018.
Por lo que respecta a la factura del agua, la tarifa se ha congelado en Terrassa coincidiendo con el fin de la concesión privada a Mina y la entrada en servicio de la empresa pública Taigua. Desde el pasado 10 de diciembre la gestión del suministro es pública en la ciudad, donde en esta primera etapa el Ayuntamiento ha decidido mantener congeladas las tarifas durante todo el ejercicio 2019.
Medicamentos. La factura farmacéutica bajará este año. Gracias a la entrada en vigor de la orden de precios de referencia de 2018, el pasado 27 de noviembre, 1.200 medicamentos se comercializarán a menor precio durante este año, entre ellos fármacos como antiinflamatorios, antitusivos, para la artrosis, el glaucoma o la hipertensión. El recorte en los precios afectará a principios activos tan populares como el ibuprofeno.