El último pleno del año aprobó inicialmente el jueves el nuevo Reglamento Orgánico Municipal (ROM), la herramienta que regula la organización y el funcionamiento de la institución local y que, salvo modificaciones puntuales, no había sido actualizado desde el año 1998. Dos décadas después y numerosos intentos fracasados de acuerdo, el nuevo ROM cuenta ahora con el apoyo unánime del pleno y supone un paso adelante en la participación ciudadana.
El reglamento incorpora novedades importantes como la apertura del pleno municipal a la participación de personas a título individual. Hasta ahora, esa posibilidad quedaba restringida a las entidades registradas. A partir de 2019 podrán llevar sus temas a debate también los ciudadanos de a pie.
Desde que se abriera la puerta de los plenos a las entidades, partidos y plataformas ciudadanas han reclamado mejorar el mecanismo para abrir el plenario a nuevas realidades y permitir que las intervenciones tuvieran réplica y no se quedaran en una mera exposición, como hasta ahora.
El ROM aprobado el miércoles amplía de 2 a 3 el número de intervenciones populares en los plenos y eleva el tiempo de exposición de los 3 minutos actuales a 5 minutos.
La novedad más importante, sin embargo, está relacionada con el mecanismo de la exposición. Los temas que lleguen al pleno de la mano de las entidades o de las personas a título individual se debatirán en las mismas condiciones que una propuesta de resolución. Es decir, los grupos municipales responderán en dos turnos de intervenciones a los que se incorporará la entidad o persona ponente. El tema de someterá a votación siempre que los participantes pidan un posicionamiento del pleno.
Al ampliarse el abanico de colectivos participantes, se ajusta el número de intervenciones por sesión. Será de un máximo de tres entidades por día -hasta ahora el límite era de dos-, a las que se sumarán un máximo de dos personas. En todos los casos será necesario estar inscrito en el registro municipal de entidades (también los ciudadanos) y solicitar la participación en el pleno.
El miércoles todos los grupos dieron su apoyo al nuevo reglamento, en cuyo redactado han participado los partidos y plataformas como la FAVT y el Parlament Ciutadà. Marc Medina, de la CUP, celebró que el ROM profundice en "democracia y transparencia". Lamentó que los marcos legales autonómico y estatal impidan avances como "descentralizar el pleno" y animó "a las entidades a presentar alegaciones" en el periodo de exposición pública.
Ciutadans también saludó que los debates de los últimos meses sobre el ROM hayan culminado en acuerdo, aunque la formación hubiera preferido que prosperara su propuesta de réplicas en ruegos y preguntas. Meritxell Lluís (PDeCAT), concejal de Participación Ciudadana en el primer tramo del mandato, recordó que con el nuevo reglamento culmina algunos avances pendientes del Reglamento de Participación Ciudadana. "Avanzamos y debemos continuar -dijo-. Lo hacemos para que la participación sea real y efectiva".
Para Carme Labòria, de ERC-MES, el nuevo documento es "ambicioso y está abierto a nuevas posibilidades". La concejal pidió que "lo que aprobamos sobre el papel ahora, nos lo creamos".