Aquello devino una bacanal de vandalismo. Dos delincuentes causaron destrozos el domingo en, al menos, veintidós vehículos estacionados en la calle de Pau Marsal. Rompieron espejos retrovisores, un clásico en este tipo de actos vandálicos nocturnos, pero también se entretuvieron en destrozar asientos de motos. La Policía Municipal detuvo a los dos presuntos autores de los daños. Los encontró en la misma zona en la que supuestamente habían actuado.
Un testigo alertó a la policía a las 5.10 de la madrugada. Esta persona acudió directamente a la Jefatura de la Policía Municipal, ubicada no muy lejos del lugar donde, según explicó, dos tipos estaban rompiendo retrovisores de vehículos. Los había visto en acción en la calle de Pau Marsal, junto a la carretera de Montcada.
Tres dotaciones policiales se dirigieron al sector indicado. Y encontraron a los sospechosos. Al primero, gracias a la colaboración ciudadana, lo pillaron en la calle de Wagner. Unos testigos habían facilitado la descripción del sujeto. El segundo implicado fue localizado en una calle próxima.
Llegó el momento de hacer recuento de los daños. Los guardias localizaron veintidós vehículos con desperfectos: diecisiete turismos (rayados y con los retrovisores rotos), dos motos y tres ciclomotores.
Los dos sospechosos acabaron detenidos por un delito de daños. La Policía Municipal llevó a cabo gestiones para avisar a los titulares de los vehículos.