La satisfacción en el rostro del técnico Oliver Ballabriga al final del encuentro contrastaba con el amargo gesto del entrenador del Figueres, Joan Esteve, que lamentaba no haber podido obtener un mejor marcador a su favor pese a jugar durante casi veinte minutos contra un equipo con un jugador menos.
El entrenador del San Cristóbal manifestó al final del encuentro que "estoy muy contento porque era una semana muy complicada en la que podíamos sacar mucho o no sacar nada y nos podía marcar anímicamente" y añadió que "el equipo está trabajando y veníamos de una derrota dura, y teníamos que sacar algo bueno".
Ballabriga señaló que la sensación que deja el equipo es "brutal" tras esta serie de tres partidos, con dos victorias y un empate en una semana, y declaró que "hemos intentado ganar poniendo mucho ritmo". Ballabriga afirmó que "jugando con once, tenía la sensación de que estaba más cerca el segundo nuestro que el empate", pero reconoció que, tras la expulsión de Hassen, por doble amonestación, todo cambió.
"Todo es anímico y nos hemos tenido que cerrar, jugar con dos líneas de cuatro y ellos se han ido arriba y en cualquier balón te podían marcar", aseguró. Sobre la segunda amarilla para Hassen por simular penalti, Ballabriga reconoció que "para mi no ha sido penalti" y destacó el gran partido de Sergi Martínez.
Mejor que el rival
Esteva, por su parte, manifestó que "en la primera parte hemos estado mejor que el rival y hemos sabido controlar las virtudes del San Cristóbal" y también dijo que "hemos movido bien la pelota y han ido apareciendo ocasiones buenas "
El técnico del Figueres afirmó que "en la segunda parte, con las ausencias de Espuña y Tena y las circunstancias del juego, no hemos estado tan bien como en la primera, y un error nos ha penalizado" y lamentó que "en los últimos minutos no hemos sido capaces de saber lo que requería el partido". Esteve apuntó que "no hemos sabido aprovechar jugar contra diez y nos hemos precipitado y 0no hemos sabido generar peligro".