El alcalde de Terrassa, Alfredo Vega, elogió ayer la labor en la ciudad sobre la formación profesional (FP) pero admitió que sigue habiendo una asignatura pendiente que es la de ajustar la oferta académica a la demanda laboral. "Queremos crecer en vocaciones industriales porque hay una gran demanda empresarial pero no hay estudiantes. Hay que trabajar para adecuar la demanda de la empresa a los estudios".
Vega abrió con esta reflexión la 16ª Jornada "A Terrassa parlem de FP" que se celebró en el Vapor Universitari. En esta ocasión la cita estuvo dedicada a los servicios de orientación al alumnado; una tarea esencial para ayudar al estudiante a que pueda encaminar mejor su futuro profesional. En este sentido, el alcalde adelantó que "Terrassa quiere despuntar en este servicio de orientación al alumnado" y defendió "la creación de un espacio común para evitar que se solapen servicios y así prestar un servicio de calidad".
La inquietud del alcalde por encajar oferta y demanda en la FP no es baladí. Un informe de la Generalitat, que ayer fue expuesto, alerta que se estima que habrá unos siete millones de vacantes en Europa en el sector de la ciencia, tecnología e ingeniería y matemáticas hasta el año 2025. Y añade que, a nivel global, hay más personas tituladas hoy que hace diez años pero que faltan técnicos (FP) en estas especialiades y también más mujeres. El informe fue aportado por Àngel Domingo, subdirector general de Innovació, Formació i Orientació del departamento de Ensenyament.
Estudiar formación profesionalizadora (FP), lo que en antaño se conocía como un oficio, está de moda. Así lo demuestran los datos de matrícula en nuestra ciudad. El curso que se cerró el pasado mes de junio acogía 3.942 estudiantes, casi dos mil más que diez años atrás, según los datos del informe del Consell de la Formació Profesisional en Terrassa.
La FP se ha renovado, ha crecido en familias y ciclos pero, a pesar de ello, sigue arrastrando ese sin sabor de que buena parte de la oferta académica no va en sintonía con la demanda laboral; es decir que hay graduados que no hallan trabajo y empresas que buscan graduados para sus puestos de trabajo.
FP Dual
Para compensar esta falta de equilibrio se han puesto algunas medidas, una de ellas la FP Dual. El modelo, inspirado en la FP de Alemania, consiste en impartir una FP en estrecha colaboración con un sector empresarial concreto que demanda trabajadores. El alumno hace formación en el aula para pasar después a la empresa y hacer prácticas que pueden estar remuneradas.
Terrassa cuenta con experiencias de este tipo y, de momento, dan su fruto. La FP Dual en Textil en el Institut Terrassa está dando buenos resultados. No hay un cien por cien de inserción laboral pero, al menos, hay más oportunidades de hallar un empleo conforme a lo que se ha estudiado.