Casi doce horas trabajaron los bomberos en el edificio. La duración de las tareas de extinción e inspección da una idea de la magnitud del fuego que el domingo devoró una vivienda y dejó inhabitable ese piso y otros dos. El incendio, al parecer originado por una vela que prendió en un ordenador, se desató el domingo por la mañana en la calle del Portal Nou, en el Centre.
A las 6.43 de la mañana llegó el aviso a Bombers de la Generalitat. El 112 informó a la Policía Municipal, que comisionó a dos dotaciones. Ya habían llegado un par de unidades de los Mossos d’Esquadra y los cuatro camiones de bomberos que se desplazaron a la calle del Portal Nou. Los agentes locales cortaron el tráfico en esa vía.
Las llamas se propagaban con ferocidad por el domicilio donde se habían originado. Corrían por las vigas de madera, se adentraban en una buhardilla. La lucha de los bomberos se antojaba ardua desde un principio. El humo espeso se extendía por el edificio, de tres plantas. Había allí once vecinos que fueron desalojados por los servicios de emergencias. A la espera de encontrar otro acomodo, fueron alojados de manera provisional en la residencia Sant Josep Oriol, en la calle de la Església.
Daños estructurales
A las 8.30 de la mañana los bomberos consideraron controlado el fuego. Controlado, pero no extinguido. Faltaba mucho tiempo aún para sofocarlo del todo, dada su voracidad allanada por el material de las vigas. Y una vez apagado, eliminados los últimos rescoldos, los bomberos dedicaron horas a revisar toda la finca humeante. Casi doce horas después de recibida la alerta, a las seis de la tarde, el cuerpo de extinción dio por acabado su servicio.
Un técnico municipal de Urbanismo inspeccionó el edificio. Según su primer dictamen, el fuego podría haber afectado a las vigas que descansaban sobre la estructura de tres viviendas del inmueble. Conclusión: esos tres pisos no eran habitables.
Había ardido parte del tejado y no había agua en varias viviendas, ni suministro eléctrico. Los vecinos menos perjudicados pudieron regresar a sus hogares. Los residentes en los domicilios inhabitables tuvieron que alojarse con familiares.
Pese a la aparatosidad del fuego y la destrucción material, no hubo heridos ni intoxicados. La policía y los bomberos investigan las causas del incendio, pero los indicios apuntan a una vela como origen. El fuego de la vela prendió en un ordenador y se propagó.