Parece ser que se va a crear una comisión para estudiar el grave problema que sufre Terrassa en torno a la concentración de alumnos inmigrantes en algunos centros educativos de la ciudad. Es lo que se llama la segregación escolar. Un informe elaborado por la sindicatura de greuges de Catalunya en el año 2106 determinaba que Terrassa era la ciudad de Catalunya con una mayor incidencia de la segregación en las aulas. El problema ya se había detectado en la ciudad y pese a ser una cuestión que siempre ha estado encima de la mesa de las autoridades educativas, no se ha abordado nunca con determinación.
En realidad se trata de un problema muy grave de muy difícil solución dadas la idiosincrasia del sistema educativo y los protocolos de matriculación. Es por ello que se encargó, también en 2016 un informe científico sobre la segregación escolar en Terrassa que debía realizar una diagnosis y realizar propuestas para su reversión. El informe, que debía ser presentado al Ayuntamiento el año pasado, no está acabado y se asegura que estará listo en esta primavera.
Se asegura que la comisión que se va a crear puede empezar a trabajar aun sin tener el documento. Es cierto que no está de más que se trabaje ya en ello, pero no es menos cierto que el estudio se antoja imprescindible como herramienta diagnóstica.
En cualquier caso, el trabajo que se debe afrontar es excepcionalmente complejo, porque como bien se decía en el Consell Escolar Municipal se trata de un asunto que va mucho más allá de lo estrictamente educativo, que afecta a lo urbanístico, a lo social y también a lo administrativo. Hace más de quince años que algunos centros advirtieron de la situación. La concentración de alumnos de familias inmigrantes en unos centros determinados viene dada por el propio perfil del barrio en el que se encuentra el centro. La posibilidad de encontrar una solución pasa por despejar muchas incógnitas. Por ejemplo, si la solución debe ser el reparto ¿cómo se conjuga eso con el derecho de las familias a elegir centro? ¿Cuál debe ser el papel de la escuela concertada, cuando sus cuotas actúan como elemento disuasorio para algunos segmentos de la población? ¿Los centros de infantil hasta bachillerato que propone ERC son la solución en si mismos? ¿Se trata sólo de redibujar el mapa escolar?
No sólo se trata de encontrar una solución, sino que esta sea esencialmente viable. La igualdad de oportunidades real en la escuela de Terrassa depende de ello.
