Las banderas española y europea fueron sustraídas la noche del jueves de la fachada del Ayuntamiento de Matadepera por segunda vez en menos de un mes. Las enseñas fueron arrebatadas por primera vez el 6 de octubre y repuestas el 24 de ese mes. Diez días han ondeando antes de que volviesen a ser robadas, presumiblemente la noche del jueves al viernes. Si la primera vez únicamente desaparecieron las enseñas, en esta última sustracción la acción fue más violenta ya que también se llevaron los mástiles, que fueron descuajaringados. Se desconoce si el autor o autores del robo utilizaron alguna herramienta para destrozar los mástiles o lo hicieron forzándolos.
En cualquier caso, la fachada del Consistorio vuelve a lucir únicamente las banderas municipal y la senyera, cuando el ordenamiento jurídico vigente contempla también como estandartes oficiales la española y la europea.
El Ayuntamiento ha puesto el caso en manos de la Policía Local, que investigará los hechos, confirmó ayer la alcaldesa, Mireia Solsona. También se llevaron a cabo indagaciones la primera vez que las banderas fueron sustraídas, aunque no se dio con los responsables. Se da la circunstancia de que una de las numerosas cámaras de seguridad que el Ayuntamiento tiene desplegadas por todo el municipio apunta directamente a la fachada del edificio consistorial, por lo que las imágenes se revisarán para intentar arrojar algo de luz, confirmó Solsona (aunque es muy probable que el autor o autores del robo actuasen de forma que no pudiesen ser reconocidos).
No es casual que esta nueva sustracción de las banderas española y europea de la fachada del Ayuntamiento se produjese la noche que sucedió a la jornada en que siete exconsellers y el exvicepresidente del Govern Oriol Junqueras ingresasen en prisión incondicional. De hecho, fuente municipales apuntaron que el núcleo urbano de Matadepera amaneció ayer con numerosas pintadas en diferentes espacios solicitando la libertad para los exconsellers encarcelados.
"Es evidente que hay gente que no quiere las banderas (española y europea), aunque es momento de que todos nos serenemos un poco porque la situación es muy complicada", reclamó ayer Solsona. "Es tan bestia lo que está pasando que la gente reacciona de forma impulsiva, y ya no quiere ni banderas ni mástiles", prosiguió la primera edil, quien hizo un llamamiento a la calma porque "la tensión que hay ya es mucha como para añadir más ahora con el tema de las banderas".
"Quizá las quitemos todas"
Sobre la reposición de las banderas, la alcaldesa dijo no tener todavía una decisión tomada, aunque dejó muy claro que, en caso de restituirlas, "no será la próxima semana porque hay que dejar pasar unos días para que nos serenemos todos un poco". "Soy consciente de que la ley es la ley, aunque no nos guste, y de que las banderas deben estar ahí, pero vamos a dejar pasar unos días porque los ánimos están muy exaltados", reiteró. Y añadió indignada que como alcaldesa "me molesta perder tiempo y dinero con este tema".
En cualquier caso, no aseguró con rotundidad que las banderas se vayan a reponer, e incluso "quizá nos planteemos quitarlas todas", conjeturó, siguiendo el ejemplo del Ayuntamiento de Sant Cugat (donde también gobierna el PDeCAT), que lleva sin banderas en su fachada desde el 22 de septiembre.
