El Vallès Occidental encabeza la generación de residuos industriales en Catalunya. En 2016, la comarca generó el 23,7% de los 3,5 millones de toneladas declaradas por las 12.441 empresas catalanas inscritas en el Registre de Productors de Residus Industrials que están obligadas a presentar anualmente la declaración de los residuos generados el año anterior.
El número de toneladas acumuladas por la industria catalana a lo largo del año pasado es sensiblemente inferior al del año anterior (en 2015, las 14.212 empresas que presentaron la declaración anual de residuos industriales generaron 3,59 toneladas), aunque la tendencia es de una cierta estabilidad desde 2012. Desde el inicio de la crisis en 2007, los residuos industriales declarados han experimentado un descenso del orden del 35%.
Este descenso en la generación de residuos se produce a pesar de que el PIB crece de forma sostenida desde 2013. "La aplicación en la industria catalana de las mejores tecnologías disponibles, como marcan las directrices europeas, explica este incremento de la eficiencia", aseguran desde el Departament de Territori i Sostenibilitat.
La actividad industrial que produce más residuos es la agroalimentaria (25%), seguida del sector metalúrgico (22%), y la industria química, de productos farmacéuticos, caucho y materias plásticas (18%), la industria del papel, artes gráficas y reproducción de soportes enregistrados (11%), y la industria de fabricación de otros productos minerales ni metálicos (4%). El 12,8% son catalogados como peligroso y provienen principalmente del sector químico y farmacéutico (64%), seguido del metalúrgico (17%). El 87,2% restante, registrados como no peligrosos, provienen principalmente del sector agroalimentario (28%), la metalurgia (23%) y la industria papelera (12%).
Cifras
Las cifras son muy similares a las de 2015, cuando la agrioalimentaria también fue la industria que generó más residuos industriales (26%), seguida por la metalúrgica (23%), la química (16%) y la papelera (11%).
En 2016, la demarcación de Barcelona es la que más residuos industriales generó, casi dos millones de toneladas, el 55,7% del total, seguida muy de lejos por la Catalunya Central (419 mil toneladas, el 11,9% del total), y el Camp de Tarragona (361 mil toneladas, el 10,2% del total). La de Tarragona es la que más residuos especiales generó en función de su propia producción.
En cuanto a comarcas, el Vallès Occidental es la que más residuos industriales genera, un 23,7% del total, seguida a mucha distancia, del Baix Llobregat (10,3%) y el Vallès Oriental (9%). En 2016, las 2.162 empresas vallesanas inscritas en el Registre de Productors de Residus Industrials generaron 836 mil toneladas de residuos industriales (104 toneladas de residuos catalogados como peligrosos y 733 mil toneladas de residuos registrados como no peligrosos), frente a las 847 mil toneladas producidas en 2015 por 2.423 empresas vallesanas.
El modelo catalán de residuos industriales se fundamenta en el principio de prevención y establece la siguiente jerarquía en la gestión: minimización, valorización (reutilización, reciclaje y recuperación) y optimización de los sistemas de disposición final.
Reciclaje
En toda Catalunya, la principal vía de gestión de los residuos industriales es la valorización (78%), teniendo en cuenta tanto la valorización en origen (84,2%) como su gestión como subproductos (4,8%), la valorización material externa (69,35) y la energética (0,7%). Según el Departament de Territori i Sostenibilitat, el papel de la industria en el ámbito del reciclaje es de un alcance muy amplio y tiene múltiples perspectivas, desde la introducción de criterios ambientales en el diseño de los productos y hasta su producción y su posterior tratamiento. La industria, además, es uno de los actores principales en el establecimiento de aquellas sinergías que permiten impulsar la demanda de materias y productos recuperados y así consolidar los mercados de estas materias.
Las actividades industriales que valorizan más residuos son el sector agroalimentario (28%), el metalúrgico (26%), el sector químico (12%), la fabricación de maquinaria y equipos informáticos (11%) y la industria papelera (11%).