Pablo Amantini no se escondió a la hora de analizar la polémica acción del penalti que cometió sobre Cristo y que acabó siendo decisivo en el desenlace de la eliminatoria. "Yo no le hago falta, el delantero se tira después de chocar conmigo. El árbitro no lo ve y el línier no lo sé, pero tenía el pinganillo roto", explicó en relación a la jugada. "En ese momento te viene a la mente lo del partido de ida, donde les regalaron un penalti. Y aquí otro. Es un final duro y sientes que te roban y que lo hacen en tu casa."
Amantini no sólo resumió los sentimientos del vestuario, sino también los propios. "Aunque pienso que no ha sido penalti, te sientes culpable. Es una jugada que marca la eliminatoria." El central argentino extendió su análisis sobre el árbitro. "Estos árbitros son muy jóvenes, demasiado. No tienen experiencia y no entienden a los jugadores. Quieren hacerse respetar a base de tarjetas."
Pese a la dureza del momento, Amantini invitó al colectivo a levantarse y a insistir en el objetivo. "Es un triste final pero es un inicio que nos tiene que volver a ilusionar para volver a intentarlo. El Terrassa ha pasado unos años complicados, la gente está recuperando la ilusión y lo que pretendemos es poner al club donde se merece. Los cimientos están puestos." Amantini expresó su deseo de continuar en el club.
El entrenador del Terrassa FC, Agustín Vacas, tampoco escondió su tristeza. "Estoy muy decepcionado, por el resultado, por la gente, por cómo está el vestuario pero sobre todo por cómo ha sido. Es muy cruel que te ganen con dos penaltis y muchas cosas que habrá tiempo de analizar. Si han sido muy superiores y te ganan, se les felicita y se acabó. Pero de esta manera costará recuperarnos."
Vacas, que fue expulsado al final del partido cuando se quejó del tiempo añadido, ahondó en la crítica arbitral. "Te extraña que en el partido de ida no hubiese informador arbitral y aquí si. Que te ganen con dos penaltis inexistentes son cosas que alguien nos explicará. Parece que hoy tocaba ser valiente. Estos árbitros son muy jóvenes para saber llevar estos partidos. Pero interesa que suban lo más pronto posible." En relación al partido, Vacas lamentó las ocasiones erradas en el primer tiempo. "Es muy difícil jugar contra un equipo que tiene poco el balón, que lo basa todo en el juego directo. En la primera parte hemos tenido dos buenas llegadas y los dos largueros. En la segunda no hemos empezado bien, pero a raiz del penalti gestionar las emociones y las prisas es complicado."
En relación a su futuro en el Terrassa, sólo expresó su deseo de continuar la próxima temporada. "Me gustaría estar en el nuevo proyecto. Sólo tengo palabras de agradecimiento hacia este club por haberse acordado de Agustín Vacas y pienso que he respondido bien. El equipo ha acabado tercero, hemos recuperado jugadores importantes, el vestuario es una piña y los números son importantes. Nos ha faltado tener algo más de gol, pero estoy muy contento de este período."
El centrocampista terrassense Àlex Fernández admitió que el vestuario estaba roto. "No hay palabras para describir lo que se ha vivido. Para todos es una decepción muy grande. Es un golpe duro."
El jugador egarense no quiso ahondar demasiado en la actuación del árbitro. "Sería perjudical para mí", se excusó. "Hay muchos factores que influyen en un partido y algunos son incontrolables para nosotros. Este partido lo tendremos en la cabeza durante mucho tiempo. Vinimos aquí con un objetivo y no se ha cumplido, por tanto para mí es un fracaso."
Àlex Fernández revindicó el trabajo realizado por el equipo. "Han habido muchos obstáculos este año, muchos malos momentos en el vestuario que hemos resuelto entre nosotros. Llegar hasta aquí ha sido un mérito, pero no seguir es una decepción muy grande." Àlex añadió que el Terrassa mereció mejor fortuna. "Hemos tenido el partido muy controlado pero las ocasiones no han entrado. En la segunda parte ellos han tenido sus ocasiones, pero no veíamos peligrar la portería sino hubiese sido por el penalti. Igual que sucedió en el partido de ida" .