"El Sant Jordi más triste", han dicho Minyons de Terrassa de la exhibición del domingo. El mazazo del inesperado fallecimiento de Carles Feiner, uno de los fundadores, cap de colla y presidente de los malva, el día anterior, a los 52 años, impregnó la Plaça Vella y restó a la actuación el componente de fiesta que tiene cualquier convocatoria castellera: muchos miembros de la colla llevaban crespones negros en la camisa; la actuación comenzó con dos pilares de duelo, uno de cinc de Minyons y uno de quatre de Castellers de Terrassa; los semblantes de todos los castellers mostraban una gran seriedad, una emoción contenida, y al final, y al contrario de lo que es habitual, los grupos de gralles de ambas colles no tocaron juntos el "toc de vermut".
El primer dos de vuit malva
Minyons cumplieron los objetivos que se habían marcado en el ensayo del viernes: descargar el tres de vuit, el primer dos de vuit amb folre de la temporada y el quatre de vuit. En la ronda de pilars descargarían el primero de seis de la temporada. El tres de nou, que se descartó, posiblemente llegue en sus próximas actuaciones en Terrassa, el 13 o el 20 de mayo. "Ha entrado gente nueva y hemos de ir paso a paso", comenta Sergi Castells.
También Castellers descargaron todo lo que habían previsto: el cinc de set, el set de set y, por primera vez este año, el tres de set aixecat per sota, "con muy buena ejecución", señala Carles Bistué, portavoz de los blauturquesa. La misma actuación la habían realizado, por la mañana, y contra pronóstico, en Igualada. El reto de los blauturquesa es ahora el quatre de vuit, que dificilmente se verá el próximo día 1 en Berga, pero que bien podría llegar el 4 de junio en su actuación de la fiesta mayor de Ca n’Aurell.
Por otra parte, Minyons ha abierto en su local un libro de condolencias a Carles Feiner. Estará disponible hasta el viernes, de seis de la tarde a diez de la noche. La colla invita a escribir en sus páginas a todas las personas que deseen rendir un último homenaje al "Negre".