El Ayuntamiento de Terrassa vivirá hoy un inusual pleno de ordenanzas, en el que el equipo de gobierno someterá a votación su propuesta de impuestos y tasas para el ejercicio 2016. La decisión política, sin embargo, quedará en el aire, ya que la oposición de izquierdas (TeC y ERC-.MES) ha forzado continuar el debate las próximas semanas y hacerlo de manera integral: impuestos y presupuesto, es decir, ingresos y gastos.
La medida pretende ganar 1,5 meses a la negociación y concentrar en el debate de presupuestos, previsto para el 22 de diciembre, toda la reflexión sobre las cuentas municipales del ejercicio 2016. El ejecutivo municipal ha aceptado llevar ese mismo día a aprobación definitiva las ordenanzas, una votación que hasta ahora era mero trámite, pero que este año irá acompañada de un debate de hondo calado.
Terrassa en Comú y ERC-MES comparecieron ayer juntos para detallar su estrategia y argumentar su crítica a la propuesta fiscal del bipartito. “Se nos pide responsabilidad desde la gran irresponsabilidad de no tener un plan de mandato claro”, dijo ayer el portavoz de ERC-MES, Isaac Albert, en rueda de prensa conjunta con Terrassa en Comú. Su líder, Xavier Matilla, abundó en la idea de que “este no es un debate que se pueda abordar desde los números. No conocemos la hoja de ruta del gobierno, que muestra una actitud continuista sin hacer un esfuerzo por mejorar la eficiencia”.
Tanto TeC como ERC-MES presentarán hoy enmiendas al proyecto fiscal del ejecutivo de Jordi Ballart. Lo harán en un pleno de trámite, una sesión marcada por la provisionalidad ya que los partidos esperan continuar negociando con vistas al pleno extraordinario del 22 de diciembre. La oposición de izquierdas espera ese sea el debate con mayúsculas de la gestión económica municipal en 2016.
Hoy, ERC-MES y Terrassa en Comú podrían abstenerse en la votación de las ordenanzas si el gobierno aprueba algunas de sus enmiendas. El gesto garantizaría la aprobación inicial, pero tanto ERC-MES como TEC dejaron claro ayer que el gesto no es un cheque en blanco de cara al 22 de diciembre.
Ambas formaciones confían en poder influir en la propuesta fiscal del ejecutivo, aunque son conscientes de que en el pleno extraordinario de presupuestos el bipartito podría contar con los 3 votos de Ciutadans. Este partido pide un gesto en la liquidación del presupuesto que permita liberar capital para amortizar deuda y aumentar así el crédito destinado a inversión en 2016. En materia fiscal rechazan la subida del 1,5 por ciento del IBI y del 5% de la tasa de residuos.
Enmiendas
Terrassa en Comú anuncio ayer que su posición será crítica con la propuesta fiscal del ejecutivo, al que acusa de proponer un aumento de la presión fiscal cuando la ciudad no ha salido de la crisis, sin tener en cuenta “que esa decisión afectan a quienes no pueden pagar y a quienes hacen un esfuerzo importante por hacer frente al pago”. Matilla coincide con Albert en la necesidad de revisar el catastro para que el IBI se ajuste a la realidad y sea más equitativo.
ERC-MES presentará un paquete alegaciones para que los impuestos se acerquen al coste del servicio, las bonificaciones se apliquen de forma progresiva y tomen de referencia el índice de renta para el cálculo de ayudas sociales y no el salario minimo.