La Fiscalía francesa acusó hoy a David Pla e Iratxe Sorzábal, detenidos el pasado martes en el País Vasco francés, de dirigir la banda terrorista ETA, entre otros cargos, informó a Efe una fuente judicial.
El Ministerio Público pidió el ingreso en prisión de ambos -que fueron presentados hoy en París ante un juez de instrucción- por “dirección de una organización creada para preparar atentados contra personas con fines terroristas”, así como por otros cinco cargos, entre ellos el porte de armas o la posesión de documentos falsos.
También reclamó la encarcelación de los otros dos detenidos en la operación policial del pasado martes, Ramón Sagarzazu y el francés Pantxo Flores, en ambos casos por “asociación de malhechores con fines terroristas”.
El juez de instrucción decidió la apertura de una investigación judicial preliminar, señaló la fuente, y agregó que ahora los presuntos etarras deberán comparecer ante el juez de las libertades y la detención que decidirá sobre su eventual ingreso en prisión.
Sobre Sorzábal y Pla recaen los cargos de, además de dirigir ETA, “receptación de financiación del terrorismo”, “posesión de armas y munición”, “porte y transporte de armas y municiones”, “receptación de armas y municiones provenientes de un robo a mano armada”, y “posesión de documentos administrativos falsificados”, todo ello dentro de una “banda organizada con fines terroristas”.
Los presuntos jefes de ETA fueron arrestados junto a Sagarzazu, antiguo responsable del aparato internacional de la organización, y Flores, propietario del caserío donde fueron detenidos, el pasado martes dentro de la llamada operación Pardines, en memoria de un guardia civil que fue una de las primeras víctimas de la banda terrorista.
Sorzábal (43 años) y Pla (40 años) tenían sendas pistolas cuando fueron capturados en Agorerreka, el caserío de Flores, donde también se encontraron documentos de identidad falsos.