El conjunto de las cuentas de la Seguridad Social presentó un déficit hasta julio de 4.423,58 millones de euros, lo que equivale al 0,40% del PIB, debido, entre otras cosas, a la debilidad de los ingresos por cotizaciones. Este saldo es la diferencia entre unos ingresos por operaciones no financieras de 75.915,6 millones de euros, que aumentan un 4,01%, y unas obligaciones reconocidas de 80.339,1 millones de euros, un 6,85% más en términos interanuales.
Así lo reflejan los datos del sistema de información contable de la Seguridad Social, que presentan una recaudación efectiva en los primeros siete meses de 73.528,2 millones de euros, un 4,67% más que en el mismo periodo de 2014. Esta partida descendía un 3,12% hace un año. No obstante, las cotizaciones sociales suman 58.468,6 millones de euros hasta julio, lo que supone un avance del 0,75%, dos centésimas menos que un mes antes.
El Gobierno presupuestó para este año un incremento de las cotizaciones del 6,8%. Concretamente, hasta el mes de julio el aumento de la cotización por ocupados fue del 2,17%, mientras que la de desempleados registró una disminución del 15,3%. En términos de caja (recursos efectivos), la tasa de crecimiento anual de las cuotas sociales fue del 1,23%, por encima del 1,12% del mismo periodo de 2014.