La entrada en servicio del Metro de Terrassa llevará aparejado un ajuste del servicio del autobús para que ambos modos de transporte funcionen de forma complementaria y evitar así posibles duplicidades. Las primeras medidas se implantarán en septiembre, mes en que está previsto el cambio de localización de al menos diez paradas de bus. El proyecto consiste en aproximarlas a las tres nuevas estaciones de Ferrocarrils de la Generalitat en Terrassa (Vallparadís-Universitat; Estació del Nord y Nacions Unides).
El concejal Marc Armengol ha explicado que esas primeras medidas serán provisionales y que su departamento tiene previsto llevar a cabo un ajuste de mayor envergadura en el plazo aproximado de un año, cuando se conozca con precisión el uso que los terrassenses hacen del nuevo medio de transporte. Armengol ha anunciado que está previsto eliminar líneas y ampliar flota, lo que permitirá mejorar la frecuencia de paso y reducir los tiempos de espera.
Desde que el pasado 30 de julio entrara en servicio la prolongación de FGC en Terrassa, la línea S1 no ha hecho más que sumar viajeros. La compañía contabilizó un incremento en la demanda del 64,1 por ciento en el Metro del Vallès entre el 29 de julio y el 5 de agosto.