Un vecino de Castellbisbal tenía que presentarse en un colegio electoral del municipio con motivo de los comicios generales del 26 de junio de 2016 para tomar posesión de su cargo como segundo vocal de la mesa electoral y no lo hizo, sin presentar además justificación alguna. Y todo ello pese a que era conocedor de su elección por sorteo para formar parte de la mesa electoral, como así se le notificó previamente. La sección sexta de la Audiencia Provincial de Barcelona tiene previsto juzgarlo mañana por un delito electoral, por el que el fiscal solicita en su escrito de acusación una pena de 20 meses de multa a razón de una cuota diaria de 15 euros, lo que supone nueve mil euros en total. El caso lo ha llevado el juzgado de instrucción número 4 de Rubí.