La fiesta mayor de Matadepera, un año más, volvió a demostrar su capacidad de convocatoria y destacó por la gran participación que se registró en todos los actos. Más de tres mil personas congregó en la noche del viernes el concierto estrella de Els Amics de les Arts y sobre unos dos mil participantes acudieron a la tradicional cena de hermandad del sábado. Así lo destacó ayer a este diario la alcaldesa, Mireia Solsona, que se mostró especialmente satisfecha porque los jóvenes, aglutinados bajo el paraguas de Vilagatzara, hayan vuelto a la comisión organizadora después de un año de ausencia. “Hemos unido esfuerzos y unificado criterios en favor de una fiesta común”, comentó ayer. El regreso de los colectivos juveniles ha permitido recuperar en esta edición actividades emblemáticas como la bajada de coches sin motor, que fue uno de los actos estrella del viernes, la Gran Animalada (una gincana sólo apta para los más atrevidos) y estrenar otras, como la Matapaellada o el taller de “castells” con Minyons de Terrassa que se celebró ayer lunes, último días de los festejos. Además, el tiempo, que amenazó lluvia algunos días, sólo obligó a suspender el concierto de Sixtus el jueves y el programa del fin de semana se desarrolló con total normalidad.
Un esfuerzo compartido
Solsona quiso remarcar ayer el esfuerzo que numerosas personas han realizado para llevar a cabo una fiesta con una variedad y cantidad de actos realmente notable. “Hay que agradecerlo a la comisión organizadora, entidades, brigadas, policía y también a los muchísimos voluntarios que, a título particular, colaboran y son vitales para que las cosas funcionen”.
Una de las actividades que congregó a más vecinos fue la cercavila que se celebró en la mañana del domingo, que este año contó con un invitado de excepción. Se trató del gigantesco Cavall dels Nebots, inspirado en la historia de los hijos ilustres del municipio de Riudoms y que es el caballo de este tipo más grande de Catalunya (5,5 metros de largo, 4,5 de altura y 1,80 de ancho). Salió de su localidad natal por tercera vez para recorrer las calles de Matadepera (fue inaugurado en julio de 2017 y sólo había ido a Reus y Barcelona). Es tan grande que hasta ocho portadores se encargan de moverlo. En la jornada del sábado destacaron, entre otras actividades, el encuentro de vehículos clásicos y antiguos, el concierto de Roleguita&Boquerón, las sardanas y la Festa Jove, que el año pasado sustituyó a las “Farraques”.
El programa del domingo, que empezó a las 9 de la mañana con la plantada de Gegants, incluyó actividades como la Gran Animalada, teatro, ajedrez y rompecabezas, además de una extensa actividad deportiva, que ha sido una constante durante toda la fiesta. La jornada culminó con un concierto de habaneras a cargo de Mariners de Riera y Port Bo.