El propietario de un perro potencialmente peligroso ha sido sancionado por el Ayuntamiento con una multa de 2.165 euros al acumular un total de seis infracciones, algunas graves o muy graves. El can atacó a otro que se arrimó a la valla de la vivienda de su propietario y lo hirió gravemente. A raíz de ese suceso y dar parte, el Consistorio comprobó que el amo del perro no disponía de los papeles pertinentes. No tenía seguro de responsabilidad civil, ni licencia para tener esa raza de perro. El can, además, no estaba registrado ni censado. El Consistorio requirió al propietario para que regularizase la situación y este no lo hizo, por lo que ha sido sancionado por incumplir la ordenanza de tenencias de animales. La sanción, que pasó por pleno, fue aprobada por unanimidad.