Primero estableció una relación de amistad con la madre, para luego llegar a dormir en casa de esta, en la localidad de Rubí. Aprovechando esta circunstancia, el individuo, de nacionalidad salvadoreña, una noche entró en la habitación de la hija -que en el momento en que ocurrieron los hechos, en el verano de 2017, contaba con 8 años-, le bajó las bragas y le lamió los genitales, abandonando después la estancia. El fiscal pide para el acusado cinco años de cárcel y una indemnización de tres mil euros por un presunto delito de abuso sexual a un menor de 13 años. El juicio está previsto que se celebre hoy en la sección novena de la Audiencia Provincial.