En 2015, Rubí tenía un parque social de vivienda de 776 inmuebles. El 2016, ya eran 812. Y en 2017 el municipio cerró el año con 1.092. El crecimiento se ha dado por las cesiones de entidades bancarias a la Agència d’Habitatge y por el aumento de viviendas que reciben ayudas al pago del alquiler. El parque lo forman 327 viviendas sociales públicas; 85 propiedad de entidades financieras cedidas al alquiler social; 66 de la bolsa de mediación de alquiler social y programa 60/40 y 720 que reciben ayudas de alquiler.