El terapeuta de Sabadell para quien el fiscal pide 37 años de cárcel acusado de abusar de cuatro pacientes negó ayer jueves en el juicio haber tenido cualquier tipo de contacto sexual con las denunciantes y afirmó que solo mantenía una "relación terapéutica" con ellas.
En la sección séptima de la Audiencia de Barcelona quedó ayer visto para sentencia el juicio contra este terapeuta, que negó haber realizado prácticas sexuales con las víctimas y su defensa también alegó que los informes forenses públicos respaldan su versión, ya que, según estos, las víctimas no presentan "síntomas de psicopatología derivados de un abuso sexual".
El tribunal, que ayer restringió el acceso al público, como ya hizo el miércoles durante la declaración de las víctimas, contó con la declaración del acusado, así como la de los peritos que examinaron el estado mental de las víctimas y del propio terapeuta.
Según el abogado de la defensa, Juan Franco, los informes periciales públicos han demostrado que las víctimas no sufren ningún trastorno derivado de los supuestos abusos y que además no hay ningún "elemento objetivo" que los acredite.
Por su parte, el abogado de la acusación particular que representa a los cuatro denunciantes, José Manuel Moratalla, afirmó que todos ellos han declarado "hasta en cinco ocasiones la misma versión" y que "nadie se puede imaginar que cuatro personas se pongan de acuerdo para denunciar unos hechos tan graves".
En su declaración, las cuatro víctimas afirmaron ayer haber sido manipuladas por el acusado hasta el punto que llegaron a verlo como "un líder espiritual", como un "dios" o su "salvador", según confirmó Moratalla.
A pesar de que la defensa presentó un informe forense que determina que el acusado no dispone de semejante capacidad de influencia, las cuatro víctimas aseguraron que el terapeuta creó un entorno "sectario".
El terapeuta, que trabajaba en un centro en Sabadell, está acusado de haber cometido cuatro delitos de abusos sexuales, por los que la fiscal pide 37 años de cárcel y un total de 720 mil euros en concepto de indemnización por los daños morales causados a las cuatro víctimas.