El ensayo pionero con una vacuna contraceptiva que los veterinarios de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) están llevando a cabo desde la primavera del año pasado para reducir la presencia de jabalíes en zonas urbanas y periurbanas está mostrando sus primeros resultados positivos. La prueba la están realizando la UAB, la Diputació y los ayuntamientos de Matadepera, Vacarisses, Sant Cugat y Terrassa. Básicamente consiste en aplicar un tratamiento a una muestra de jabalíes para anular su función reproductora, tanto en machos como en hembras.
El Grupo de Investigación sobre Infertilidad (GRI-BCN) de la Facultad de Veterinaria de la UAB emitió ayer una nota explicando que ya ha presentado a los representantes de los municipios de Terrassa, Matadepera, Vacarisses y Sant Cugat y a la Diputació las primeras observaciones del estudio científico que está realizando para evaluar la efectividad de la vacuna de immunocontracepción en jabalíes.
Según los datos aportados por los investigadores, durante los últimos nueve meses de 2017 capturaron y estudiaron a cerca de cien jabalíes, de los que 60 fueron tratados con la vacuna contraceptiva, mientras que el resto sirvieron como animales de control.
Seguimiento
Estos jabalíes fueron capturados principalmente durante la primavera y el verano del año pasado y el mayor número de capturas se efectuó en los términos municipales de Matadepera y Vacarisses, en el entorno del Parc Natural de Sant Llorenç. Tras ser identificados y aplicarles la vacuna a 60 de ellos, fueron puestos en libertad para hacerles un seguimiento (se les insertó un localizador).
Los impulsores del ensayo destacan en la nota que casi un 40% de esos jabalíes fueron recapturados, lo que les permitió obtener muestras seriadas de los ejemplares para poder analizar y evaluar el efecto de la vacuna.
Una vez analizadas las muestras, se ha constatado que el nivel hormonal de progesterona y de testosterona en suero en hembras y machos, respectivamente, indica que todas las hembras tratadas tienen la progesterona baja (la hormona de la gestación). En cuanto a la testosterona en machos, la hormona se mantuvo baja en el 40% y queda por determinar su fuente -para descartar las no relacionadas con el tratamiento- y la presencia o ausencia de células espermáticas activas.
Según los veterinarios, aún quedaría por realizar el seguimiento del estado fisiológico y sanitario de los animales, y el análisis de la respuesta inmunitaria de los mismos a la vacuna, así como los indicadores sociales vinculados al proyecto.
Durante este 2018 se seguirán vacunando ejemplares nuevos y se intentará recapturar a los que quedan de 2017 sin analizar para obtener más muestras que permitan disponer de una mayor información sobre el efecto de la vacuna a largo plazo.
Esta prueba piloto es la primera de estas características que se pone en marcha a nivel mundial en jabalíes en estado salvaje que merodean por entornos urbanos y periurbanos (la vacuna ya se ha probado con éxito en jabalíes en cautividad en el Reino Unido). El proyecto tiene una duración de tres años, de manera que está previsto administrar la vacuna a unos 300 jabalíes (a una media de cien por año).
