De "macroparticipativa" califica el presidente de la Germandat, Toti Garcia, la última edición de las Festes de Sant Sebastià (finalizaron el lunes), con la "mayor participación", añade, que han registrado durante los cuatro años que lleva al frente de la entidad, la más antigua de Matadepera con 117 años de historia. Estas han sido, además, las últimas Festes de Sant Sebastià con Toti Garcia al frente de la Germandat ya que, anuncia, en primavera abandona el cargo.
El matadeperense, de 53 años y que se dedica a realizar trabajos forestales y de jardinería, no esconde su satisfacción por la evolución -en positivo, se entiende- que han experimentado los festejos bajo su presidencia, un mérito que rápidamente extiende al resto de la junta que lo acompaña, "un equipo de gente muy preparada", enfatiza.
El broche a esa ganas de evolucionar, de mantener la tradición pero con la vista puesta en el futuro, ha sido quizá la participación activa en esta edición de las mujeres en la Baixada del Pi por primera vez en la historia de las fiestas. También por primera vez en la retirada del pino, el pasado lunes en la plaza de Cal Baldiró, fue una mujer la que se encargó de cortar el tronco: Núria Garcia, la hija de Toti.
Abrirse a las entidades
"La implicación de la gente, el voluntariado, es la clave del éxito de las Festes de Sant Sebastià", desvela el presidente de la Germandat, quien cifra en 150 los voluntarios que se han sumado a los festejos este año. Pero ha habido otros factores, prosigue, que explican el progresivo aumento de la participación a lo largo de estos últimos cuatro años, como el esfuerzo de la Germandat por abrirse más a las entidades -y lograr, por tanto, una fiesta más representativa-, la mejora de la gestión interna o el aumento de socios (en el último año se ha pasado de 420 a 470).
Toti Garcia fue elegido presidente en marzo de 2014 en sustitución de Roger González. Es el tercer miembro de una misma familia que preside la Germandat, después de que lo hiciese su padre, Antonio Garcia "Pintoret" (1974-1975), y su hermano Jordi Garcia (2008-2012).
Así, las de 2015 fueron las primeras Festes de Sant Sebastià que se organizaron bajo su mandato. Fue en esa edición cuando se recuperó la plantada del pino a mano, después de que en los ocho años anteriores se hiciese de manera mecánica. Esta es otra de las herencias de Toti Garcia tras su paso por la presidencia, que abandonará en la asamblea anual del próximo abril.
"Para mi ha sido un placer y un orgullo dirigir la entidad más antigua del pueblo", afirma con afecto. ¿Y qué balance personal hace? "Me ha servido para formarme como persona y vecino de este pueblo", contesta. Y abunda: "He aprendido muchísimo y estoy orgulloso de haber tratado a tanta gente. La experiencia me ha enriquecido".
Sobre su marcha, advierte de entrada que no se va porque esté "quemado", sino porque deja la Germandat en manos de "un equipo de gente muy bien formada y si me quedase, frenaría las oportunidades de evolucionar de las fiestas". "Por eso doy un paso al lado, para no ser un freno a un nuevo dinamismo, a nuevas ideas", remacha Toti, que tampoco se quedará en la junta. Sobre su sucesor, el candidato oficial es Guillem Montagut, actual vicepresidente de la entidad.