A partir del próximo mes, Vacarisses pondrá en marcha un nuevo sistema de recogida selectiva de residuos denominado puerta a puerta, lo que significa, como indica su nombre, que la basura se recogerá casa por casa y se eliminarán de la vía pública los 700 contenedores de reciclaje que existen tanto en superficie como soterrados. La experiencia se lleva a cabo desde hace año en otros municipios con éxito -el modelo a imitar por su gran eficiencia sería Matadepera- y allí donde se ha puesto en funcionamiento ha aumentado notablemente el volumen de recogida.
Al menos, así lo afirma la Agència de Residus de Catalunya, al señalar que aquellas localidades que aplican el puerta a puerta alcanzan mayoritariamente unas tasas de recogida selectiva global de entre un 60% y un 85% sobre el total de residuos generados, teniendo en cuenta que previamente partían de indicadores muy inferiores, incluso del 10% en algunos casos. Además, defiende la Agència de Residus, esta inversión a mejor de la tendencia se alcanza en muy pocas semanas, suponiendo un salto cuantitativo y cualitativo inmediato y continuado en el tiempo.
La medida entrará en vigor en noviembre de manera paulatina, de manera que todos los domicilios recibirán gratuitamente los correspondientes recipientes para separa los residuos (orgánica, plástico, cartón, vidrio…), al tiempo que se irán retirando los contenedores de las calles de la localidad.
Retorno
Con el método actual, la recogida selectiva de residuos en el municipio es del 39%, cifra que se prevé aumentar notablemente con el puerta a puerta. Así lo explicó ayer el alcalde de Vacarisses, Antoni Masana, quien quiso dejar claro que la puesta en marcha de este nuevo sistema no tiene relación alguna con el incremento del recibo de la basura en un 40% (ahora se pasa a pagar 69 euros), como afirman los impulsores de una recogida de firmas contra ese aumento. “El recibo ha subido porque con lo que recaudábamos apenas cubríamos el 30% del coste del servicio, que es del orden un millón de euros al año, y tras la subida llegamos casi al 40%”, afirmó al respecto el primer edil. “Hemos querido equilibrar un poco los porcentajes”, añadió Masana, quien recordó que Vacarisses es el segundo municipio de la comarca que menos paga por este concepto.
En relación a la recogida puerta a puerta, admitió que a priori “encarece un poco” el servicio, pero “se compensará con el retorno que tendrá si se hacen bien las cosas, por lo que al final no tiene por qué salir más caro”. De hecho, hay varios factores que explican el balance económico favorable del puerta a puerta: la reducción de la frecuencia de recogida de la fracción resto; la redistribución de recursos para aumentar la captación de materia orgánica; el uso de vehículos no compactadores; la desaparición de los gastos de mantenimiento, limpieza de contenedores, y la tendencia al aumento de los costes de los tratamientos finalistas e incremento de los ingresos por reciclaje.