Desde el mes de noviembre, Vacarisses tendrá un nuevo sistema de recogida de residuos puerta a puerta. Se trata de un cambio notable, debido a "criterios medioambientales, normativos y económicos, con el objetivo de alcanzar el máximo nivel de reciclaje", afirman fuentes municipales. De hecho, la iniciativa ya se ha llevado a cabo en varios municipios catalanes, con muy buenos resultados. El nuevo sistema implica la retirada de la gran mayoría de los 700 contenedores que hay en las calles del municipio (existen, además, contenedores soterrados, que también dejarán de funcionar).
El "Porta a Porta" es un sistema de recogida de desechos de referencia que consiste en entregar los residuos, separados, al servicio municipal de recogida ante la puerta de casa, en unos días y horas determinadas para cada residuo. Según las citadas fuentes, durante los próximos meses, se realizarán diversas actuaciones para ir conformando el sistema en Vacarisses y, unos días antes de la implantación, el Ayuntamiento facilitará a la ciudadanía y a los establecimientos el material necesario para entregar los residuos a la puerta de casa.
Desde el punto de vista medioambiental, se pretende reducir progresivamente el vertido de materiales reciclables para introducir un nuevo modelo de economía circular y hacer de esta localidad un entorno aún más verde y sostenible. Los criterios normativos vienen promovidos por la Directiva Europea 2008/98, de 19 de noviembre, de residuos; la ley estatal 22/2011, de 28 de julio, de residuos y suelos contaminados, y el programa de prevención y gestión de residuos y recursos de Catalunya 2013-2020 (Precat20), donde se fijan los techos mínimos de reciclaje a alcanzar hasta el 2020: el 50%, según las normativas europea y estatal, y el 60%, según la catalana. Vacarisses está aún lejos de esta meta, ya que, en 2015, sólo se recicló selectivamente un 37,96% de los residuos municipales. "En Vacarisses recogemos entre un 35 y 40% de residuos reciclados. Con este nuevo sistema, y de forma inmediata, llegaremos entre el 60% y el 70. En cualquier caso, nuestro objetivo final es alcanzar el 90%", explicó ayer a Diari de Terrassa Toni Masana, alcalde de Vacarisses.
También motivos económicos
A los motivos medioambientales, hay que añadir también económicos. Y es que, hasta 2020, cada tonelada de desperdicio no reciclada que se genere en el municipio será más costosa para el Ayuntamiento, tanto en su entrada al Centre de Tractament de Residus del Vallès (CTRV) como por el canon adicional que cobra la Agència de Residus de la Generalitat de Catalunya. En cambio, los restos reciclados serán bonificados. "Por lo tanto, reciclar correctamente ya supone un beneficio económico directo y, si, además, logramos un alto porcentaje de reciclaje, en un breve periodo de tiempo, la recogida puerta a puerta resultará más barata que el sistema tradicional que hay en estos momentos" . Ya se ha comenzado a informar a la ciudadanía al respecto, con publicaciones especiales y unas sesiones informativas los próximos días para poder resolver todas las dudas que el cambio pueda generar. Además, aprovechando las fiestas mayores de las urbanizaciones del municipio, una informadora ambiental se desplazará para atender el vecindario. Y antes de implantar el nuevo sistema, el Ayuntamiento facilitará a la población ya los establecimientos el material necesario para entregar los residuos.
Por todo ello, el Ayuntamiento solicita la colaboración a la ciudadanía para hacer de Vacarisses un pueblo respetuoso con el medio.
