Más participación, más público y la consolidación de los espacios de los festejos. Ese es el resumen de la fiesta mayor de Sant Cugat, que a lo largo de cinco días -entre el miércoles y el domingo- ofreció cerca de 300 actividad, en las que la ciudadanía se volcó de forma multitudinaria.
200 paellas y tres mil comensales; 500 participantes en el ‘correplaces’; 34 bailadores infantiles y 58 parejas adultas en el ‘Paga-li Joan’; 200 bailadores en el ‘lindy hop’ o 1.500 metros cuadrados de escenarios diarios son solo algunas de las cifras de los festejos.
En cuanto a los 14 espacios en que se dividió la fiesta -tres más que en la edición pasada-, la ‘Càpsula Claustre’ fue uno de los tres nuevos mejor valorados.
Ocio y espectáculos
Con actividades para los más pequeños y sus padres, pasaron por la ‘Càpsula Claustre’ unas tres mil personas. La propuesta puso de manifiesto la necesidad de completar la programación de los festejos con actividades para la franja de 0 a 3 años.
Asimismo, el espacio ‘DesPlaça Jove’, en el parque Ramon Barnils, se convirtió en el lugar de referencia del colectivo juvenil, con especial mención del concierto de Oques Grasses, que llenó el recinto por completo.
El espacio ‘Food&Fun’ ofreció a las familias un lugar de juegos, ocio y espectáculos. La ‘Plaça de la Dansa’ fue otra de las zonas con mejor ambiente y la ‘Plaça del Jazz’, que celebró diez años, convirtió el Celler en un espacio de referencia para los amantes del jazz.
El espacio ‘STQbeer Festival’, dedicado a la cerveza artesana, también fue un éxito de público, mientras que la nueva ubicación de la caseta del Centro Popular Andaluz, en la calle de Pau VI, no afectó a su actividad, siendo, como cada año, uno de los espacios masivos de los festejos.
