El festival "Teatre sense teatre", organizado por el Ayuntamiento con el apoyo de la compañía La Tal, disfrutó este fin de semana de una gran respuesta de público, en la que fue su segunda edición, que continuó la estela exitosa de la primera.
Miles de rubinenses no quisieron perderse la decena de espectáculos programados en espacios de la ciudad poco habituales para la representación de artes escénicas, como son el Celler Cooperatiu, la plaza del Doctor Guardiet, el gimnasio de la Schola, la isla peatonal, el Ateneu Municipal y el solar del Centre Democràtic Republicà (estos dos últimos espacios se estrenaron en esta segunda edición).
En cuanto a los montajes que requerían entrada, "Terror y miseria en el primer franquismo", de la compañía local Esbarjo, registró un lleno total, con unos 60 espectadores en sus tres sesiones en el Ateneu. Igual suerte corrió el espectáculo musical de marionetas "Mrs. Brownie", que reunió a una cincuentena de personas en El Celler.
Aforo
La obra infantil "Tripula" (premio Butaca al mejor espectáculo infantil), de Farrés Brothers, registró 87 espectadores en sus dos sesiones en el gimnasio de la Schola, mientras que la función que inauguró el festival, "A mí no me escribió Tennessee Williams (porque no me conocía)", interpretado por Roberto G. Alonso y precedido de un gran éxito en el festival de Tàrrega, llenó dos terceras partes del aforo del solar del Centre Democràtic Republicà con 67 espectadores.
Asimismo, en los jardines del Ateneu, la comedia de Shakespeare "Las alegres casadas de Windsor" congregó a un total de 57 personas. La representación llegó a Rubí directamente del ciclo de comedias del dramaturgo inglés que programa cada año la compañía Parking Shakespeare en el Parc del Nord de Barcelona.
Respecto a los espectáculos de acceso gratuito, todos registraron una gran afluencia de espectadores. Montajes como "Mulïer", una propuesta de danza sobre zancos ganadora de dos premios Max (mejor espectáculo de calle y mejor composición musical), o el último espectáculo de la payasa Pepa Plana, "Suite", dirigido por el rubinense Leandre Ribera, llenaron por completo sus respectivos escenarios.
Calidad
La programación del festival "Teatre sense teatre" se enriqueció con la propuesta itinerante "Les pompiers", de la compañía La Tal, que recorrió la isla de peatones de viernes a domingo para invitar al público a disfrutar del certamen.
En el apartado de incidencias, sólo hay que anotar la sustitución a última hora del espectáculo de danza, teatro y circo "Pelat" por una lesión de su intérprete. En su lugar, el público de Rubí pudo disfrutar de "L’home que perdia els botons", a cargo de la compañía Circ Pànic.
Para la alcaldesa, Ana María Martínez, esta segunda edición del festival ha significado "la consolidación de una propuesta de enorme calidad que saca la cultura a la calle y la pone al alcance de toda la ciudadanía". "Creemos -prosiguió la primera edil- que es una magnífica manera de ir haciendo boca de cara a la fiesta mayor y completar así un junio de lujo culturalmente hablando".