El Ayuntamiento de Castellbisbal ha retirado un depósito de mil litros que estaba lleno de un líquido contaminante compuesto por pinturas y disolventes y que había sido abandonado en medio de un bosque del municipio, en concreto en un espacio denominado Pla del Canyet, informó ayer en un comunicado el Consistorio.
El contenedor fue localizado el pasado marzo, pero no pudo ser retirado hasta el día 4 de este mes (el pasado jueves) ya que el hecho de que contuviera sustancias contaminantes obligó a seguir un protocolo y adoptar toda una serie de medidas preventivas. Entre ellas, la primera fue tomar una muestra del líquido y llevarla a analizar a un laboratorio, que finalmente determinó que se trataba de pinturas y disolventes.
Una vez definido el tipo de residuo, el segundo paso consistió en encargar a una empresa especializada el vaciado del bidón mediante un sistema de aspiración que garantizara que no se produciría ningún tipo de derramamiento que pudiera contaminar el suelo del bosque.
El líquido vaciado del depósito abandonado ha sido transportado hasta una planta de tratamiento de residuos.
Residuo especial
Una vez vaciado, en estos momentos ya sólo queda pendiente la retirada del contenedor, tarea que correrá a cargo de la Deixalleria municipal, que lo recogerá y hará un tratamiento adecuado como residuo especial. La actuación se llevará a cabo en los próximos días.
El coste de toda esta operación de retirada del bidón abandonado ha ascendido a casi 1.200 euros, que asume íntegramente el Ayuntamiento.
En el comunicado emitido por el Consistorio, la concejalía de Medio Ambiente calificó el abandono de este depósito de pinturas y disolventes como un acto "extremadamente grave e irresponsable", ya que, añadió el departamento municipal, si este tipo de residuo hubiera afectado al suelo, se habrían podido producir daños en el entorno natural de la localidad de muy difícil reparación.