La búsqueda de nuevos pozos de agua para abastecer al municipio, ante la escasez que arrastra desde inicios del verano, está provocando al Ayuntamiento verdaderos calentamientos de cabeza, que ve cómo los problemas crecen. Así, a la falta de agua se une ahora otro handicap: el coste económico del conjunto de actuaciones que se están llevando a cabo para intentar garantizar el suministro a la población. Una inversión que ya sobrepasa los 112 mil euros y que está suponiendo un varapalo importante a las arcas municipales, desvela la web municipal de Vacarisses.
De entrada, el Consistorio ya ha anunciado que este gasto incrementará de forma notable el déficit municipal con el que se cerrará 2016, que se prevé que supere los 200 mil euros (más de la mitad de esa cifra corresponde a la factura generada por la búsqueda de soluciones a la falta de agua).
Las tareas realizadas en los meses de verano y que ha representado ese gasto de 112 mil euros se dividen en tres grupos: trabajos de investigación y perforación para la captación de agua (36.232 euros); trabajos de equipamiento e instalación eléctrica de los pozos (38.865 euros) y mejora y control de la red de abastecimiento y distribución (37.225 euros).
Ayudas
Ante esta situación de sequía generalizada y con el escenario de pocas lluvias vivido en los últimos meses en Catalunya, la Agència Catalana de l’Aigua (ACA) ha abierto una linea de ayudas para financiar cisternas de agua y obras de emergencia relacionadas con la falta de agua o con su calidad. El Ayuntamiento de Vacarisses ya ha anunciado que se acogerá a éstas y otras ayudas y convocatorias que se presenten para atenuar los efectos negativos que estos gastos inesperados están teniendo sobre las arcas municipales.
Pese a haber superado el verano con la reducción de caudales de consumo, la situación de emergencia persiste, alerta el Ayuntamiento, y añade que la columna de agua del principal pozo de abastecimiento del municipio, en Can Serra, no deja de descender.
La concejalía de Servicios Municipales está trabajando en diferentes direcciones: la búsqueda de asesoramiento especializado en gestión del agua, acuíferos y subsuelo o la posibilidad de activar el pozo del Fresno -posibilidad en la que los técnicos municipales trabajan desde hace meses- son dos de ellas. También continúan los contactos con la ACA, que en estos momentos se plantea recuperar un proyecto para traer el agua desde Terrassa.
La buena noticia es que una de las perforaciones realizadas el pasado mes de agosto dio resultados positivos. Se trata de un nuevo pozo situado a unos 20 metros de distancia del principal y con una profundidad de 180 metros. Este pozo ya se ha puesto en marcha, conectándolo a la estación de bombeo de L’Orpina. Aunque su caudal es bajo (200 metros cúbicos al día), se ha decidido aprovecharlo dada la situación de emergencia hídrica que sufre Vacarisses.
