Vallés

Recooperem dio 4.033 raciones de comida a familias vulnerables

Un total de 4.033 raciones de comida se repartieron el curso pasado entre familias vulnerables de la comarca a través del proyecto Recooperem. La iniciativa está impulsada por el Consell Comarcal y el Consorci de Residus del Vallès Occidental y consiste en aprovechar los alimentos que sobran de los comedores escolares de las escuelas de la comarca adheridas al proyecto para destinarlos a familias necesitadas.

Estas 4.033 raciones de comida que se repartieron el curso pasado entre familias de la comarca supusieron evitar el derroche de más de 1.900 kilos de alimentos.

Actualmente, en el proyecto participan once escuelas de siete municipios: cuatro colegios de Castellar; dos de Viladecavalls y uno en cada uno de los municipios de Vacarisses, Matadepera, Ullastrell, Rellinars y Sant Llorenç Savall.

Por localidades, las cuatro escuelas de Castellar repartieron 2.622 raciones de comida (1.209 kilos de alimentos); las dos de Viladecavalls 239 raciones (111 kilos); la de Matadepera, 44 raciones (21 kilos); 78 raciones (34 kilos) la de Vacarisses; la de Rellinars, 721 raciones (370 kilos) y la de Sant Llorenç Savall, 329 raciones (179 kilos). No hay cifras disponibles de Ullastrell.

El Consell Comarcal y el Consorci de Residus trabajan en la actualidad para incorporar nuevas escuelas y nuevos municipios en el proyecto, con la finalidad de ampliar la red de distribución de comida y aumentar la prevención de generación de residuos.

Fiambreras
Por ahora se puede confirmar la incorporación de escuelas de los municipios de Terrassa y Rubí. En estos momentos se están estableciendo las condiciones y los parámetros que deben regir estas nuevas incorporaciones y se trabaja para que se puedan hacer efectivas en los próximos meses.

El proyecto Recooperem tiene un doble objetivo: social y mediambiental. Respecto al primero, se da cobertura a familias de la comarca que se encuentran en situación de vulnerabilidad -ya sea por dependencia o por su situación económica- ya que pueden disponer de comida cocinada en las escuelas y con las máximas garantías sanitarias. En relación al objetivo medioambiental, se evita la generación de residuos y el derroche alimenticio.

El funcionamiento de Recooperem es sencillo. Una vez finalizado el servicio diario de comedor escolar, la comida disponible apta para su consumo se prepara en unas fiambreras facilitadas por los entes comarcales. El alimento cocinado que no ha sido servido se reparte en recipientes que se etiquetan con información relevante y se congelan a -18ºC. Una entidad social o el Rebost Solidari distribuye luego la comida entre familias vulnerables de la comarca.

LA CIFRA
1.920 kilos. Es la comida que se evitó derrochar el curso pasado de los comedores escolares adheridos al proyecto.

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