En este nuevo mandato, Rellinars, que pese a contar con 726 habitantes registra una intensa vida política, está escribiendo un capítulo más de la guerra que desde hace años mantienen ERC y CiU por llevar las riendas del municipio y que en la pasada legislatura se materializó en una moción de censura de los republicanos (con el apoyo entonces del PSC, ahora sin representación municipal) para arrebatar a CiU la alcaldía. Un enfrentamiento entre las dos formaciones -que en ocasiones traspasa de la esfera política a la personal- que desentona con el buen entendimiento entre ambos partidos en el ámbito de la política catalana.