El pleno municipal aprobó de forma definitiva, y con los votos favorables de todos los grupos, una modificación puntual de las normas urbanísticas del plan parcial de La Llana que tiene como voluntad adecuar éste nuevo planteamiento a la realidad económica actual. Según esta modificación, las parcelas con una superficie igual o superior a los 6.000 metros cuadrados con edificios existentes se permitirá, como excepción, el desarrollo de más de una actividad, es decir, la compartición de las naves.
Superficie
Cuando Incasol promovió el sector, a principios de los años 90, se estableció que las parcelas debían tener una superficie mínima de 3.000 metros cuadrados, con lo que se favorecía la instalación de medianas y grandes empresas en La Llana, pero la normativa impedía que por muy grande que fuera la nave se pudiera desarrollar más de una actividad en ellas. En el contexto actual esto podría ser un lastre para algunas compañías que han reducido su actividad y no necesitan tanto espacio. Hasta ahora el único modo que tenían estas empresas de poder compartir sus naves con las otras era derribarlas para luego poder dividir el terreno. Con ésta modificación se pondrá solución al problema.