El pleno ordinario celebrado el lunes aprobó por unanimidad un cambio en el reglamento de los consejos de barrio, para hacer posible que, por primera vez, concejales de la oposición puedan dirigir estos órganos de participación. Esta disposición es una de la medidas que Mercè Conesa, alcaldesa de Sant Cugat, se comprometió a impulsar en el discurso de investidura con el fin de promover la participación ciudadana. Hasta el momento la presidencia de los consejos de barrio la ejercían únicamente cargos electos que formaban parte del Gobierno. El hecho de haberse aprobado de forma unánime refleja la voluntad por parte de todos los partidos políticos de dialogar y de este modo intercambiar opiniones y distintos puntos de vista.
