En el marco de los planes de empleo que gestiona el Ayuntamiento de Matadepera, se han contratado a dos agentes cívicos que realizarán en los próximos meses diversas tareas de información de sensibilización y concienciación por las calles de la trama urbana. Los trabajos, que se llevarán a cabo en el mismo término municipal hasta el próximo mes de diciembre, consistirán en informar a los ciudadanos de sus derechos y deberes y de los diferentes servicios del municipio.
Las dos agentes cívicos (se trata de dos mujeres) también podrán recoger quejas y sugerencias, acercando de esta manera el Ayuntamiento al ciudadano. Estas aportaciones ciudadanas serán revisadas y estudiadas con el fin de mejorar el funcionamiento del municipio y resolver situaciones que, a veces, el propio Ayuntamiento desconoce.
Las agentes, que no tiene potestad sancionadora (su tarea es únicamente informativa), también se encargarán de detectar los posible incidentes que se puedan producir en los diferentes servicios y equipamientos municipales, dando traslado al Ayuntamiento para que los resuelva.
El Ayuntamiento ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que colabore y facilite el trabajos de estas dos agentes cívicos, ya que, recuerdan fuentes municipales, “su objetivo pasa por poner el Ayuntamiento al servicio de los ciudadanos para conseguir mejoras y hacer que el municipio sea un lugar con más calidad para vivir”.
Las dos agentes cívicos, que esta semana han salido juntas, se dividirán a partir del lunes, de manera que una hará el turno de mañana (de diez de la mañana a una de la tarde) y otra el de tarde (de cuatro a ocho de la tarde).
Contrato
Es la primera vez que el Ayuntamiento de Matadepera pone en marcha una iniciativa que, si bien funciona desde hace años en diferentes poblaciones catalanas, es bastante novedosa dentro de la comarca en municipios de las características de Matadepera.
La concejal de Participación Ciudadana, Montse Royes, explicó ayer que la iniciativa persigue “fomentar la cultura del civismo” entre la población. “Hace tiempo -prosiguió- que teníamos en mente la idea de los agentes cívicos y hemos aprovechado la puesta en marcha de los planes de ocupación para tirarla adelante”. La voluntad es darle continuidad a la iniciativa, una vez que finalice en diciembre el contrato de las dos agentes cívicos (tiene una duración de seis meses). “Esa es la voluntad. Ya veremos luego si lo podemos hacer”, dijo Royes.
Controlar el buen funcionamiento de la recogida selectiva, de la recogida de excrementos caninos o del cumplimiento de la ordenanza sobre perros peligrosos son sólo algunas de las tareas que llevarán a cabo las dos agentes cívicos.
