En los ocho municipios del área de influencia de Terrassa han ganado las elecciones las mismas formaciones políticas que se encuentran al frente de los ayuntamientos y, en algunos casos, incluso han mejorado sus resultados, lo que quiere decir que en los próximos cuatro años repetirán los mismos alcaldes, a excepción de Matadepera y Ullastrell.
En el primer caso, Junts per Matadepera (PDeCAT), que revalida la mayoría absoluta por cuarta vez consecutiva, tiene como nuevo alcalde a Nil López -hasta ahora concejal de Urbanismo y Obras-, quien sustituye al frente de la alcaldía a Miria Solsona, tras tres legislaturas ostentando la vara de mando.
En Ullastrell, ERC encara su tercer mandato consecutivo con mayoría absoluta con Jaume Puig -hasta ahora primer teniente de alcalde-, como nuevo alcalde. Sustituye a Joan Ballbè después de ocho años al frente del Consistorio.
En el resto de municipios repiten los mismos alcaldes. En Viladecavalls lo hace Cesca Berenguer por Treballem Junts per Viladecavalls (PDeCAT), que tendrá que gobernar en minoría (como ya ha hecho este mandato) con cinco concejales de trece posibles. En Vacarisses, el alcalde republicano Antoni Masana revalida el cargo, crece en número de votos y con seis regidores (dos más que en las municipales de 2015) se queda a solo uno de la mayoría absoluta.
En Castellbisbal, el alcalde Joan Playà vuelve a ganar los comicios al frente de Alternativa per Castellbisbal repitiendo los mismos seis concejales que ya tenía, por lo que tendrá que gobernar en minoría (si la política de pactos no lo evita). En Rellinars continuará al frente de la alcaldía Marta Roquè representando esta vez únicamente a Grup Independent de Rellinars (GIR). Esta formación y ERC se presentaron a las elecciones por separado después de 12 años gobernando en coalición y GIR se ha acabado llevándose el gato al agua: ha arrasado con cinco concejales, lo que le da la mayoría absoluta, frente a los dos de ERC, que pasa a liderar la oposición en solitario.
Junts y ERC, hegemónicos
En Rubí, la alcaldesa socialista Ana María Martínez también reedita el cargo al ganar su formación con diez concejales, cuatro más que en 2015 y a tres de la mayoría absoluta, mientras que en Sant Cugat, la primera edil Carmela Fortuny seguirá al frente de la alcaldía de la mano de Junts per Sant Cugat, que vuelve a vencer con nueve concejales, dos menos que este mandato y a cuatro de la mayoría absoluta. Fortuny, de hecho, no se presentaba a la reelección ya que cogió la vara de mando en el último tramo del mandaro en sustitución de Mercè Conesa, que se fue a dirigir el Port de Barcelona.
Estas elecciones han dejado claro que los exconvergentes de Junts per Catalunya y ERC siguen mandando en la mayoría de las ocho poblaciones del área de influencia de Terrassa. En Matadepera, Junts revalida con ocho concejales de trece posibles su mayoría absoluta por cuarta legislatura consecutiva. También vuelve a ganar el PDeCAT en Viladecavalls con cinco concejales (los mismos que tenía) y en Sant Cugat con nueve (pierde dos). En ambos casos tendrán que gobernar en minoría.
ERC, por su lado, consolida su mayoría absoluta en Ullastrell, con siete concejales de once posibles, y casi la acaricia en Vacarisses, donde crece dos y con seis ediles se queda a solo uno de conseguirla. También destaca el empujón de ERC en Sant Cugat (dobla el número de concejales) y Rubí (crece dos), municipios en los que pasa a liderar la oposición.
El PSC crece en Rubí
Fuera de los dominios de Junts y ERC, en Rubí los socialistas vuelven a ganar y mejoran resultados respecto a las municipales de 2015, con diez concejales (de 25 posibles), cuatro más que en la cita anterior. En Castellbisbal, Alternativa per Castellbisbal se impone con seis ediles, con los socialistas pisándole los talones con cinco. Ambos partidos obtienen idéntico número de regidores que en 2015.
Subrayar que Ciutadans logra entrar por primera en los ayuntamientos de Matadepera y Vacarisses, con un concejal en cada uno. Han sido las primeras municipales en que el partido naranja presentaba lista en estas poblaciones.
Respecto a la participación en estas ocho localidades del área de influencia de Terrassa, la más alta se dio en Rellinars, con el 76.1% del electorado, seguido de Ullastrell (74,1%) y Sant Cugat (70,5%). La más baja se registró en Rubí (57,7%). En cuanto a las candidaturas, ERC, Junts y PSC fueron las únicas formaciones que presentaron listas en las ocho poblaciones. Les siguió Ciutadans, que concurrió a los comicios en todas las localidades menos en Rellinars.